Christian Sanz

En Guaymallén sigue la desesperación: más adulteración de documentos y borrado de pruebas

Por Christian Sanz, director periodístico de Diario Mendoza Today.

Desde este espacio se lo viene relatando in extenso desde hace algunas semanas. Refiere a la desesperación de los funcionarios guaymallinos respecto de la casi segura derrota en las elecciones venideras, que los dejará expuestos por la enorme cantidad de desaguisados acometidos.

Una de las direcciones más comprometidas es Servicios Comunitarios Seguridad Vial, a cargo de Jorge “Nene” Carrizo. Allí mismo, en estas horas, se trabaja contrarreloj a efectos de “dibujar” documentos de diversa índole. Todo, como se dijo, a efectos de tapar la corrupción.

Preocupa, por caso, una licitación de grúas del año 2019, cuyas irregularidades fueron expuestas por Diario Mendoza Today.

Por ello, se ha convocado a los mismos empleados involucrados entonces, para que adulteren los papeles con el mismo “puño y letra”.

El nerviosismo de los funcionarios que responden a Marcelino Iglesias es más que evidente: los principales encuestadores juran que el joven Gabriel Pradines será el seguro ganador de la contienda electoral.

Ello explica la furia del malogrado intendente de Guaymallén, que en las últimas horas maldijo a propios y ajenos —sobre todo los propios— por no haber fiscalizado como corresponde durante las PASO.

Como sea, todo es desesperación en el municipio. Lo que viene es inminente y muchos han empezado a despegarse de los hechos de corrupción. Lo único que “zafa” a Marcelino y su gente es la generosa pauta oficial que logra la censura tan esperada.

Sin embargo, nada es eterno. Luis Lobos se cansó de pagar y también terminó castigado por los medios. Simplemente porque “el sol no se puede tapar con un dedo”.

Digresiones aparte, otro curro guaymallino que merece contarse: Santiago “Buenas Ondas” Morales, quien oficia de chambelán de las reinas de la Vendimia, se armó una fundación que les cobra a los que quieren participar de las ferias de ese departamento. Por tres días, les “factura” 10 mil pesos. Lindo curro.

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