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Guaymallén: la feroz guerra intestina interna entre Marcos Calvente y los emisarios de Marcelino Iglesias

Por Néstor Bethencourt, desde la redacción de Diario Mendoza Today.

Incontables mensajes llegados al correo nesbeth@gmail.com al cual se agrega el WhatsApp 2612327760, puntualizaron hechos corruptos, bizarros, antiéticos y fuera de toda lógica de buena administración que Guaymallén merece (y que no tiene desde hace más de una década).

La gestión de Marcelino Iglesias que comenzó allá por el 2015, era prometedora y terminó con su segunda gestión inundada de nepotismo, hechos de corrupción y robos… y con un tendal de funcionarios denunciados.

Tras su reelección, Iglesias mostró la hilacha del brutal despilfarro: desde entonces, varios hechos de corrupción se fueron sucediendo, escalando tanto en forma dineraria como en cantidad de estas.

Ni hablar de los dos últimos años de gestión, donde probablemente con la complicidad política provincialse permitió que casi nada se investigue y que las pocas causas abiertas, muy pocas, por cierto, se duerman junto a la orden de algún funcionario judicial más amigo del poder que de la justicia misma. Como la causa del robo de materiales en DOA, Dirección de Obras por Administración que involucra autoridades municipales y partidarias y con la gravedad e tener funcionarios citados que nunca concurrieron y aun así está cajoneada.

La debacle era inevitable, Marcelino quería la continuidad de Nicolás González Perejamo mientras Alfredo Cornejoanhelaba lo mismo respecto del secretario de obras Marcos Calvente (González Perejamo estaría ocupando un cargo de asesor de la diputada provincial Evelyn Pérez, primera presidenta del concejo era Iglesias, tendría importantes licitaciones vigentes en la comuna en nombre de terceros, y suele realizar algo parecido a stand up haciendo de consultor político en medios amigos de la pauta, más gracioso que efectivo ya que su historial no resiste archivo)-

El presente es corrupción total, incluye perseguidos políticos cesanteados, un real sálvese quien pueda y manoteando lo que sea, mezclado con actos de autoritarismo pleno de los nuevos viejos directivos que no solo maltratan a sus empleados, sino que dan ordenes que rozan lo bizarro, y cuidado que alguien transmita para afuera lo que pasa, es condenado.

Lo más importante es que esa imposición de promover la continuidad de Iglesias por Calvente, produjo una feroz lucha intestina entre propios del partido, comparable a la que hubo en su momento entre Luis Lobos, y Alejandro Abraham.

Mientras en el medio del revoleo de funcionarios de uno y otro bando, están los sufridos empleados que ya rompieron la barrera de la indigencia hace rato, mientras con bronca mastican como las licitaciones entre amigos se actualizan y multiplican como no sucede con los derrotados sueldos que cobran, eso sí, los funcionarios están de fiesta, tienen paella, autos municipales a destajo para uso personal, o en su defecto con esos mismos vehículos son llevados y traídos a trabajar con chofer, desde cargos jerárquicos, hasta con la menor clase, lo importante es ser obsecuente con los poderosos de siempre.

La sociedad lo ve, por ello la cantidad de respuestas recibidas a mi correo: nesbeth@gmail.com y ni hablar de los propios integrantes de la familia municipal, muchos de jerarquía que están dentro de la guerra Calvente-Iglesias.

No me quedaría corto en decir que Guaymallén está en sintonía con lo que viene sucediendo en Las Heras, excepto que Alfredo Cornejo no le soltó la mano a ninguno de los contendientes, sino habrá alto pochoclo para deglutir.

No ven que la gente está harta, y la tormenta se avecina, ya que el ciudadano común que sufre los embates de los aumentos de tasas ya no se siente representado por estas no gestiones, que ni los empleados pueden soportar.

Esto recién comienza, no crean en los cantos de sirena porque no están en la comuna, mientras iremos dando precisiones con nombre y apellido como siempre con su aporte absolutamente valioso esperemos lograr que Guaymallén merezca ser vivido como corresponde.

Por último y más importante: El caso de la movilidad que fuera utilizada como bien propio por Rubén Darío Suarez que denunciáramos gracias al aporte recibido, ya se encuentra durmiendo en dependencias municipales como corresponde, una pequeña gran victoria sobre la corrupción.

Gracias por estar en contacto, esta actividad tan apasionante es realizada con pasión (por $ 50.000.- mensuales, (menos que lo que gana un municipal), genera que entre todos podamos, aunque cueste.

Se esperan novedades muy fuertes estos días, estén atentos,

Contacto directo para denuncias, opiniones y demás: Néstor Bethencourt

Mail:nesbeth@gmail.comyWhatsApp 2612327760 (También pueden solicitar ser incluidos en lista de difusión)

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