Las transferencias no automáticas del Estado nacional a las provincias tuvieron en abril un punto de inflexión, ya que por primera vez en el año el monto de las pagadas superó al de las devengadas, en lo que se podría interpretar como una consecuencia inevitable luego de meses de postergaciones.
Según el último informe de la consultora Politikon Chaco, en base a datos oficiales, las Las transferencias no automáticas de abril 2024 a provincias y CABA totalizaron $35.855 millones en su etapa devengada y $68.160 millones en la etapa pagada, una relación inversa a la de los tres meses anteriores, caracterizados por lo que vulgarmente se denomina «bicicleta», es decir la postergación del pago de las obligaciones que, indefectiblemente, en algún momento deberán pagarse, más allá de las ventajas para la Nación por los efectos causados por la inflación en los importes nominales, conocidos en la jerga como «licuadora».
En moneda constante, las transferencias devengadas tuvieron una caída del 88,9%, superior a las del primer trimestre (-61,7% en enero, -66,4% en febrero y -78,9% en marzo). Por su parte, las transferencias pagadas mostraron una caída también significativa, aunque menor (81,8%).
En lo que refiere a Mendoza, el monto devengado asciende a 416 millones de pesos, mientras que el pagado llega a 686 millones.
«Es la primera vez en lo que va del 2024 donde las transferencias pagadas superan a las devengadas, situación que muestra dos cosas: pago de deuda anterior por un lado, y freno al devengamiento de recursos durante el mes de análisis», destacó la entidad dirigida por Alejandro Pegoraro.
La progresión de ese fenómeno queda en evidencia al comprobarse que en enero el crédito pagado fue de apenas el 2,3% del devengado; en febrero creció al 26,3% y en marzo, subió al 47,3%, para pasar en abril al 190,1%.
Para Politikon Chaco, «esta situación tiene dos aristas: en primer lugar, hay un avance en pago de deuda contraída por fondos devengados pero no pagados de meses previos; pero también grafican el freno en los envíos devengados, que muestran el menor volumen en más de dos años».
En lo referido a los envíos en etapa devengado, todas las jurisdicciones presentaron bajas con diversos desempeños: la más leve se vio en CABA (-29%) y la más fuertes en Córdoba y Entre Ríos (-99,9% en cada caso), mientras que en la etapa pagada, también todos los distritos mostraron bajas: la menor también fue CABA (-30,3%) y la más fuertes en Entre Ríos y Salta (-99% en cada caso).
Más allá de lo ocurrido en abril, el primer cuatrimestre deja en evidencia que aún resta un alineamiento de las dos variables, ya que la caída real de las pagadas (-84,2%) supera a la de las devengadas (-76,7%).
