🙄 De Marchi es puro enigma: ¿Qué piensa? ¿Con qué partido irá? ¿Quién será su candidato a vicegobernador?
Qué dice y qué piensa, en público y en privado, el principal actor de la política mendocina de estas horas.
Omar De Marchi se animó a lo impensado. Aquello que nadie jamás pensó que ocurriría: rompió con Cambia Mendoza y evitó ir a las PASO contra Alfredo Cornejo.
El referente del PRO lo niega públicamente, pero en privado lo dice sin vueltas: admite que avanzó en ese camino porque no tenía chances de resultar vencedor en caso de competir por dentro del espacio mendocino.
“Ellos manejan la maquinaria, que no es confiable ni transparente”, les dice a sus íntimos. Por “afuera” sabe que tiene más posibilidades de ganar. Al menos, eso le dicen las encuestas. Así y todo no se siente vencedor ni mucho menos. “Tengo mucho por construir aún”, sostiene.
Observa las críticas por elevación, sobre todo las que le prodigan aquellos que integran su mismo espacio. Cuando le preguntan, miente. Asegura que no mira nada de nada, que no tiene tiempo para hacerlo.
De todas maneras, evita responder a las provocaciones. Prefiere escapar de la chicana y enfocarse en la campaña, que lo agota por completo. Reuniones y más reuniones, con propios y ajenos. En Mendoza y Buenos Aires.
Casi todos los encuentros son en secreto. Para no generar especulaciones de ningún tipo. La mayoría se han motorizado con quien podría ser su candidato a vicegobernador, Jorge Difonso. También coquetea con el intendente de Las Heras, Daniel Orozo, molesto por la intrusión de la cúpula de Cambia Mendoza en la interna de su departamento. ¿Se viene la ruptura del cacique lasherino para irse con De Marchi?
“Quiero discutir las cosas que le importan a la gente, Mendoza tiene problemas de todo tipo”, sostiene el ex intendente de Luján cuando le preguntan sobre sus eventuales alianzas políticas.
Si le insisten, se pone el cassette: “Falta todavía para el día del cierre de alianzas, horas antes del 12 de abril veremos qué hacemos”.
Tampoco le gusta hablar sobre la intervención que sufrió el PRO en Mendoza. De hecho, lo enfurece. “Desde una oficina de Buenos Aires no pueden venir a decidir qué se hace en la provincia”, sostiene. Y añade: “El partido tiene competencia local para decidir en qué frente compite”.
No obstante, se esperanza: “No estamos afuera del PRO, es una intervención parcial, la vamos a pelear”, asevera. Ciertamente, la lucha está perdida, y él lo sabe. Porque los tiempos judiciales son totalmente diferentes a los tiempos de la política.
No obstante, seguirá adelante, siempre por afuera: “Si no diéramos esta pelea hablaría mal de nosotros”, describe. Y vuelve a refutar a aquellos interesados que lo vinculan con el peronismo y con Sergio Massa. “No tenemos nada que ver con ellos, es la campaña sucia de los mismos de siempre”, dice tajante.
Como publicó Diario Mendoza Today el domingo pasado, De Marchi está convencido de que, detrás de la mayoría de los “dardos” que le arrojan, habría intereses que responden al cornejismo, pagados con ostentosos cargos en el Estado mendocino.
Ello lo enfurece y lo incomoda, aunque no tanto como cuando le preguntan cómo quedó su relación con Horacio Rodríguez Larreta. ¿Sigue trabajando para él o no?
“Suelo participar de una reunión semanal, aunque ahora estaré enfocado en Mendoza”, puntualiza, dejando sobre el tapete la distancia que viene. Por las dudas, aclara: “Con Horacio seguimos siendo amigos”.
Finalmente, intenta explicar qué es lo que falló: “Les expliqué en Buenos Aires la situación, pero solo hasta donde quisieron escuchar”.
En buen romance, De Marchi cree que fue claro en su explicación, pero no fue bien interpretado por sus interlocutores. Por ninguno de ellos. Raro en política.
