Municipales autoconvocados de Mendoza advierten por el deterioro del salario y las condiciones laborales

En las últimas horas, agentes municipales autoconvocados de la provincia de Mendoza emitieron un duro comunicado titulado “De sindicatos, federaciones y contubernios con el Estado”.

Allí advierten sobre “el deterioro del salario mínimo vital y móvil” y denuncian que trabajan “en condiciones laborales de extrema gravedad”.

El documento, al que tuvo acceso Diario Mendoza Today exige a los sindicatos y federaciones “ponerse a trabajar por los Empleados Municipales por sus sueldos, por sus trabajos y por su dignidad”.

Lo firman: Claudio Daniel Aguilera, Juan Pablo Micheli, Ruben Andres Santos, Claudio Daniel Aguilera, Claudio Daniel Aguilera, Jesica Natalia Martinez, Victor Agüero, Diego Soria, Héctor José Lucero, Marcela Eliana Gil, Jaquelina Morales, Ezequiel Maturano, Daniel Alaniz, Carlos Cristin Cabrera, Claudio Lucero, Lourdes del Carmen Aguirre, Daniel Aguirre y Jaquelina Soledad Longone.

Qué dice el documento completo:

Es sabido de la importancia del trabajador municipal, pues es el que mantiene y limpia la Provincia en todos sus aspectos, un trabajador municipal “parado” significa una “Provincia Sucia” y en serios problemas.

En este punto creemos relevante profundizar en un debate actual y presente en la cartera de los diferentes actores de las relaciones laborales, vinculado a uno de los principios necesarios para el funcionamiento de sindicatos democráticos: el principio de la libertad sindical. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha resaltado la importancia de este aspecto en su Convenio 87, del año 1948, relativo a la libertad sindical y a la protección del derecho de sindicación.

Si bien nuestro país ha ratificado el mencionado convenio en el año 1960, el debate se plantea al analizar la estructura sindical argentina y la factibilidad que sus particularidades le otorgan al cumplimiento de este principio, puntualmente a lo referente en el artículo 2: “Los trabajadores y los empleadores, sin ninguna distinción y sin autorización previa, tienen el derecho de constituir las organizaciones que estimen convenientes, así como el de afiliarse a estas organizaciones, con la sola condición de observar los estatutos de las mismas” (OIT, 2006).

La premisa que proclama la OIT para el ejercicio de la libertad sindical es la existencia de un modelo democrático de relaciones laborales inserto en un sistema político abierto y pluralista (Tomada, 2001). Cierta perspectiva considera que el reconocimiento de ciertos privilegios a favor de la asociación sindical más representativa en la Argentina no es incompatible con la libertad sindical, siendo éste el eje central de las recomendaciones de la OIT para el caso argentino y los “cuestionamientos” hacia la Ley N° 23.551.

La discusión se plantea en tanto la compatibilidad del principio de “mayor representatividad” con el principio de libertad sindical; “(…) con la posibilidad de armonizar un sistema que promueva la concentración sindical y al mismo tiempo garantice la libertad sindical en todos sus aspectos” (Recalde, 2004).

En este sentido, un sindicato “de constitución democrática, con una oposición institucionalizada y una activa participación de sus miembros tienden a conformar una comunidad política de referencia para los trabajadores, que genera una importante solidaridad de clase y sentido identitario entre los miembros y sus líderes” (Stepan-Norris y Zeitlin, 1995: 829, citado por Ventrici, 2009: 31). En consecuencia, estos sindicatos democráticos serían más eficientes en desafiar el predominio del capital en la esfera de la producción.

Así, este planteo interviene fuertemente en el debate en torno a la compatibilidad o contradicción entre la eficacia y la democratización. De estos pioneros resaltamos el propósito de Michels para demostrar que, independientemente de las reglas e ideales democráticos que pueden presentar una organización, siempre se tenderá a formarse una burocracia a la que él denomina como: una oligarquía que detenta realmente el poder.

Situación actual

Es sabido que el Empleado Municipal viene sufriendo el deterioro del salario mínimo vital y móvil y trabajando en condiciones laborales de extrema gravedad. A esto le tenemos que sumar los aprietes que se sufren para el tiempo de las elecciones, generando un estado emocional de intranquilidad, desasosiego y preocupación.

Muchos de nosotros llegamos a tener graves problemas físicos y psíquicos al extremo, causantes de fatales desenlaces (problemas cardiovasculares, depresión, ansiedad, que llevan a tomar decisiones graves) además, de problemas familiares. Todo esto parece no preocuparles a los sindicatos como tradicionales; y mucho menos a las Federaciones (Federación de Sindicatos Municipales de la Provincia de Mendoza y Federación de Sindicatos Municipales de Mendoza) que nuclean a estos Sindicatos.

La dirigencia actual de estas asociaciones se ha tornado en una oligarquía que ostenta el poder sindical tomando beneficios para ellos y no para todos, ya que desde hace por lo menos 10 años que no se fija un piso salarial que deben arreglar en las Paritarias Provinciales y que sirve como base en los Municipios, ante esto los Jefes Comunales hacen ABUSO de lo que deben paritar con los Sindicatos Departamentales que de por si ya son aliados de los Gobiernos, Sindicatos que están todos “arreglados” quedando los Empleados Municipales a la buena de Dios y a los arreglos paritarios en “baja” que nos lleva a tener hoy sueldos de pobreza e indigencia.

Como ejemplo ponemos lo sucedido en Rivadavia con SOEM que demuestra lo que decimos, donde se realizó un elección sin autorización y de “huevo” donde se hicieron diversos reclamos por ello y a la fecha luego de 10 meses no se tienen novedades. Desde nuestro lugar hacemos responsables a estas entidades que “NO” representan el pensamiento del Municipal de la situación paupérrima por la que atraviesan nuestros compañeros en la Provincia. Ante esto exigimos a los sindicatos y federaciones a ponerse a trabajar por los Empleados Municipales por sus sueldos, por sus trabajos y por su “dignidad” y pedimos: Solicitar de forma inmediata a las Federaciones intimen al Gobierno a la apertura urgente de la Paritaria Municipal Provincial. Plantear en la misma un SMVyM de $100.000 sin concesiones.

Elevar las asignaciones familiares a la par de las Nacionales. Mejorar la calidad de trabajo de los Municipales en toda la provincia. Proponer la rediscusión de la paritaria N°20 por la que se rige nuestro trabajo por haber quedado caduca ya que los nuevos tiempos plantean nuevos problemas. Blanqueo de los ítems en negro.