🔋 La Justicia y la IGS se pusieron las pilas: avanzan las denuncias de Mendoza Today contra la corrupción policial
Tanto esfuerzo valió la pena. Los burócratas de turno han decidido depurar la fuerza policial, sobre la base de las notas de este diario.
La policía de Mendoza vive en estas horas un verdadero tembladeral, básicamente por las revelaciones de este diario sobre sus trapisondas, relacionados con el mundo del crimen organizado, los desarmaderos e incluso el narcotráfico.
En sus notas periodísticas, Mendoza Today no ha discriminado en zonas geográficas ni en escalafones a la hora de denunciar la podredumbre policial. Dicho sea de paso, ello es parte de una depuración que vienen impulsando un grupo de uniformados honestos.
Ciertamente, los corruptos son unos pocos, poquísimos, pero corren con una ventaja: cuentan con ostentosos cargos que les garantizan la pertinente inmunidad. E impunidad.
Este diario viene revelando sus nombres y los hechos que los comprometen, sin filtro. Desde maltrato laboral, hasta robos en allanamientos, pasando por el más repudiable tráfico de estupefacientes. Ello ha provocado la furia de algunos de los involucrados, que han llamado furiosos a esta redacción, intentando negar lo innegable. Incluso amenazado con enviar cartas documento e iniciar causas judiciales.
A todos ellos se los invitó a accionar legalmente, y se espera que lo hagan realmente. Para exponer finalmente la abundante prueba al respecto: fotos, videos y escuchas telefónicas, muchas de las cuales ya están incorporadas a causas judiciales que se resisten a avanzar.
Párrafo aparte merece la Inspección General de Justicia, que ahora mismo se ha hecho eco de lo aquí publicado y ha avanzado contra la mayoría de los señalados en Mendoza Today. Se espera que sus burócratas lleguen hasta lo más alto de la cúpula policial.
En los últimos días, valga mencionar que han llamado a los periodistas de este diario puntuales funcionarios judiciales, de la IGS e incluso legisladores, que buscan impulsar medidas de depuración de la fuerza. A todos se les ha aportado lo que han solicitado. Habrá que ver si ahora hacen algo al respecto.
Finalmente, cabe destacar la valentía de todos esos policías que se animaron a contar sus testimonios en primera persona. Insistieron en sus denuncias a pesar de la negativa de los principales medios de la provincia, que les dieron la espalda una y otra vez.
A todos ellos, valga el pertinente reconocimiento por el cambio que promete llegar, más temprano que tarde.
Porque, como dijo el escritor, dramaturgo y periodista argentino Ernesto Mallo, “leyes hay, lo que falta es la justicia”.
