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Le dieron prisión perpetua a un hombre de 25 años por asaltar y matar a un trabajador en Las Heras

Se trata de Enzo Leonardo Figueroa, alias "Leito", quien fue hallado culpable por un jurado popular por el crimen de Esteban Olivera.

Un joven de 25 años fue condenado hoy a prisión perpetua por el asesinato a disparos de un hombre, cometido en abril del año pasado durante un intento de robo en Las Heras.

Se trata de Enzo Leonardo Figueroa, quien fue declarado culpable por un jurado popular del “homicidio criminis causa” de Esteban Olivera (40), tras el debate que comenzó este lunes y se llevó adelante en el Polo Judicial Penal.

Tras el veredicto por unanimidad del jurado integrado por doce personas, el juez técnico Mateo Bermejo -que condujo el debate- sentenció al acusado a la pena de prisión perpetua.

Durante los alegatos, el jurado popular escuchó a Gustavo Pirrello y Fernando Guzzo, representantes del Ministerio Público Fiscal, quienes solicitaron un veredicto de culpabilidad por “homicidio criminis causa” para el imputado en la causa.

“No tengo dudas de que el autor del disparo es el señor Figueroa”, sostuvo Guzzo durante sus alegatos.

A Olivera “lo mataron arteramente intentando robarle. Dieciséis segundos y la vida por nada”, añadió el fiscal en jefe en referencia al tiempo que duró el ataque.

Por su parte, desde la querella acompañaron el pedido de los fiscales y afirmaron que a Esteban “lo mataron para robarle el celular”.

En tanto, la defensa sostuvo que el autor de los disparos fue otro sujeto que intervino en el asalto junto a Figueroa.

Cámaras de seguridad de la zona, testimonios, escuchas telefónicas y ruedas de reconocimiento, entre otras pruebas comprometieron al condenado.

El hecho ocurrió cuando el 8 de abril cerca de las 8 de la mañana, cuando Olivera salió de su casa en dirección a la estación del Metrotranvía para ir a su trabajo.

En la intersección de calles Sargento Cabral y Avellaneda, de Las Heras, dos sujetos lo abordaron con intenciones de robo y lo amenazaron para robarles sus pertenecías, mientras que el hombre, que iba con sus auriculares puestos, aparentemente no los escuchó.

Tras ello, uno de los sujetos le disparó en el muslo izquierdo y ante la resistencia de la víctima, volvió a disparar con un arma calibre 22 impactándole en el tórax, lo que le provocó la muerte.

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