Dejar el vehículo en la calle implica en la actualidad someterse al riesgo de levantarse y encontrarlo sin ruedas por completo o, al menos, sin alguna de ellas.
Ello incluye la sorpresa de las cerraduras forzadas para el robo de las ruedas de auxilio que se ubican dentro del baúl. Y todo ello en tan sólo cuestión de minutos. A veces, segundos
En Mendoza, es un tipo de delito que se empieza a hacer cada vez más visible, y pareciera complejo de combatir. El siguiente video muestra cómo dos cacos abren un automóvil en plena Juan B. Justo y, acto seguido, roban también el auxilio. Fue posteado por el colega Matías Pascualetti.
Así le robaron la rueda de auxilio a un auto en calle Juan B. Justo de @ciudaddemendoza. Utilizaron inhibidor de alarma. Quedo registro de los dos delincuentes @radionihuil pic.twitter.com/awdV6o6CoK
— Matias Pascualetti (@MATIPASCUALETTI) January 19, 2023
No es el único caso: en Martínez de Rozas y Paraná, no muy lejos de allí, ocurrió algo similar. Un robo que también quedó captado por las cámaras de seguridad.
En este caso, el posteo fue del colega Gastón Lucero Suárez en su cuenta de Twitter:
Mismo modus operandi en calle Martínez de Rozas y Paraná. Mismo tiempo para ejecutar el robo. Evidentemente es una banda que está por la zona robando ruedas de auxilio. pic.twitter.com/0dxSr6GGdq
— Gastón Lucero Suárez (@gastonlucero88) January 19, 2023
Normalmente, la maniobra que utilizan para cometer este tipo de delito es rápida. Se requieren al menos dos personas, que se movilizan a bordo de un vehículo generalmente robado o con patente adulterada.
Se suele realizar en horas nocturnas, debido a que hay menos circulación en las calles con gente que pueda observar la operatoria. Eligen un objetivo, se detienen cerca de él, le aflojan las tuercas de las ruedas y mientras uno levanta el auto con sus propias manos, el otro se lleva el preciado elemento.
Toda la situación dura apenas segundos, en general es captada por la cámara de seguridad privada de algún vecino aunque sin poder individualizar a los delincuentes y puede repetirse tantas veces como gomas le queden al auto.
Como se dijo, es un tipo de hecho que crece en Mendoza y que mantiene en vilo a los encargados de la seguridad en la provincia.