Nicolás SanzPortada

🪖 Falta de recursos, atraso y rezago: ¿Cómo hará Luis Petri para ponderar a las Fuerzas Armadas?

El mendocino necesita trazar una estrategia que lleve devuelta a las Fuerzas Armadas al lugar protagónico que deben tener en el marco de la defensa del país, pero “no hay plata”, por lo que deberá contar con una habilidad que lo pondrá a prueba los próximos años.

Desde el día uno en el que el mendocino Luis Petri tomó el control del Ministerio de Defensa de la Nación no paró de reunirse con la cúpula de las fuerzas armadas tomando un rol mucho más activo del que se le recuerda a sus antecesores Jorge Taiana y Agustín Rossi, quienes ocuparon el mismo cargo durante la gestión de Alberto Fernández.

Su arribo al Gobierno de Javier Milei fue visto con buenos ojos, sobre todo teniendo en cuenta el hecho de que fue uno de los (muy poquitos) radicales que se sumaron a apoyar al hoy presidente cuando estaba en carrera a la Casa Rosada compitiendo con el ex ministro de Economía Sergio Massa.

Hubo muchos festejos al respecto de la designación de Petri, sobre todo desde el lado del PRO, que lo apoyaron y lo felicitaron. Pero la algarabía no es eterna y es hora de darle a las Fuerzas Armadas el rol que se merecen.

De allí se desprende la innumerable cantidad de dificultades que deberá afrontar el ex precandidato a gobernador de la provincia de Mendoza, porque es cierto que hace décadas los diferentes gobiernos dejaron rezagado al Ministerio de Defensa.

Hoy el Gobierno de Milei busca ajustar las cuentas lo máximo posible, el problema es que no hay lugar para hacer lo propio con las Fuerzas Armadas, desfinanciadas y con la necesidad de adquirir aviones caza multipropósito o submarinos.

Por tal motivo, Luis Petri tendrá que tener la habilidad suficiente para reconstruir la capacidad de combate, algo, como se dijo arriba, descuidado durante los últimos Gobiernos. ¿Cómo lo hará con recursos básicos? Ahí el meollo de la cuestión. El ministro deberá trazar un plan estratégico elocuente y seductor.

Esto es realmente necesario teniendo en cuenta que sin un programa ordenado de nada servirá intentar valorar a las Fuerzas Armadas, incluso cuando los recursos que se destinen sean abultados.

Muestra de ello fue la creación del Fondo Nacional para la Defensa (FONDEF), que fue creado durante la administración de Alberto Fernández. El dinero destinado a dicha caja sirvió para la redacción de incontables papers que luego no se traducían a la realidad.

Modernización

Uno de los grandes problemas que tuvo Oscar Aguad al frente de la cartera de Defensa durante la gestión del ex presidente Mauricio Macri, dicho sea de paso, fue no haber planteado una estrategia de modernización.

Es sabido que muchos de las problemáticas que hoy tienen las Fuerzas Armadas es que los planes trazados corresponden a un esquema de mediados del siglo pasado. Ese es otro de los puntos ambiciosos con los que tendrá que lidiar Petri.

Las cosas cambiaron demasiado el último medio siglo y hoy las Fuerzas Armadas tienen un rol mucho más protagónico en una serie de áreas. Los entrenamientos, los recursos e incluso la geopolítica dieron una vuelta de 180 grados.

Para darle valoración se necesita adquirir otro tipo de materiales, como drones de última generación; reconfigurar la educación de los cadetes e incluso darle participación dentro del Gobierno a los servicios militares, quienes serían fundamentales en la toma de decisiones relacionadas con la defensa del país.

Pero de vuelta: ¿Cómo se puede avanzar por el lado correcto cuando, como dijo Milei, “no hay plata”? Uno de los temas que se debate al interior de la cartera conducida por Petri es la necesidad de llevar adelante un esquema de cooperación internacional.

En esa línea, el mendocino tendrá que trabajar codo a codo con la canciller Diana Mondino para lograr fortalecer las relaciones militares de Argentina con otros países cuyas fuerzas son protagonistas de la escena.

Uno de los problemas con los que cuenta Argentina en este punto es que hay países con Fuerzas Armadas muy fuertes en el mundo que difícilmente quieran cooperar, como Rusia e Inglaterra.

Y si de dinero se habla, tampoco puede ajustarse el salario de la milicia, mucho menos teniendo en cuenta que una gran parte de la victoria de Milei en las presidenciales provino justamente de ese lugar.

Movimientos

De todas formas, parece que Petri está decidido en ponderar y poner a las Fuerzas Armadas en el lugar que se merecen dentro de la defensa que requiere el país.

Muestra de ello es el patrullaje que hoy se encuentran haciendo en mares argentinos con el fin de detectar pesqueros chinos ilegales. Es que en la última década, la pesca de parte de estos navíos se incrementó un 800%.

A pesar de lo exacerbado del mencionado dato, puede que sea erróneo y se haya quedado corto. Es que se supo que entre 2018 y 2021 los pesqueros chinos apagaron sus sistemas de rastreo por unas 600 mil horas.

Allí Argentina podría encontrar apoyo de parte de Chile, que trata de solucionar la misma problemática, aunque con escaso éxito. Vale destacar que China logró construir la flota pesquera de aguas profundas más grande del mundo, contando con casi 3 mil barcos.

Sin embargo, uno de los primeros actos oficiales de Petri al frente de Defensa fue encargar despliegue preventivo del dispositivo de apoyo a la comunidad frente al alerta del Servicio de Hidrografía Naval (SHN) sobre los posibles efectos de la sudestada en la costa de Buenos Aires el 19 de diciembre pasado.

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