Nicolás SanzPortada

✌️ Cómo los trolls tuvieron influencia en los resultados electorales de Mendoza (y cómo detectarlos)

En Mendoza la campaña electoral fue feroz y no faltaron las cuentas truchas que beneficiaron a Cornejo, así como a nivel nacional se observa el mismo vicio de cara a las elecciones del próximo domingo.

La campaña electoral en Mendoza se destacó por la aparición de cientos de trolls en redes sociales tal cual Diario Mendoza Today demostró en esta nota y algo que se puede ver de cara a las elecciones nacionales que se disputarán el próximo domingo.

En tal sentido, es necesario entender cómo funcionan, y por qué ayudaron, en este caso, a Alfredo Cornejo a ganar las elecciones provinciales siendo electo como sucesor del radical Rodolfo Suarez.

Lo más probables es que a esta altura de la penetración de internet y de las redes sociales  en cada uno de los aspectos de nuestra vida, hayamos sido víctimas de almenos un “troll”. Troll, en el contexto de internet, se usa para referirse a personas que publican mensajes instigadores en sitios de internet, como blogs, redes sociales, foros, solo por nombrar algunos.

Estas personas desarrollan publicaciones irritantes, normalmente con una falsa identidad, con el propósito de molestar, provocar o generar controversia no constructiva, además, en la mayoría de los casos, no tienen otra iniciativa más que llevar la contracorriente.

Otra definición muy interesante de troll, la dio la escritora Lindy West en una publicación en The Guardian donde habla de su propia experiencia con trolls.

“Trolling es una forma de abuso por recreación -por lo general en el anonimato- con la intención de hacerle perder el tiempo al sujeto, sacarlo de sus casillas, frustrarlo o asustarlo para callarlo. A veces es relativamente inofensivo (como haciendo preguntas contradictorias para generar una discusión) o inmaduro (como burlándose de mi peso o inteligencia), pero (sobre todo cuando el sujeto es una mujer joven), se llega a rayar el acoso o el hostigamiento”.

El troll se convirtió en un factor inevitable para la política, tal es así que en las redes sociales son fáciles de identificar, ya que su contenido es exclusivamente político, no solo en sus comentarios sino también en su perfil.

Al estar en el anonimato y tener una pérdida temporal de la identidad, los trolls tienen el afán de comportarse de manera que no lo harían en su vida cotidiana, ya que se pierden las regulaciones sociales y limites que se tienen en situaciones “cara a cara”.

Características 

-Los trolls son inmunes a críticas y argumentos lógicos, por lo que no se puede razonar con ellos, aun cuando el argumento sea sumamente sólido.

-No sienten remordimiento, algunos de ellos pudieran ser clasificados como sociópatas y, como tales, se regocijan al herir los sentimientos de otras personas.

-Se ven a sí mismos por encima de las convenciones sociales.

-No se apegan a las reglas básicas de convivencia.

-Consideran estar por encima de cualquier responsabilidad o limitante social.

-Se alimentan del enojo y de los insultos que se les dirija, las emociones de desagrado o indignación que provocan les genera una mórbida sensación de placer.

-Existen dos maneras de lidiar con los trolls, ignorarlos o bloquearlos, para que así no puedan hacer más publicaciones.

-Lo que motiva al troll es poder alimentar su ego sin tener que sufrir las consecuencias de sus actos. Se escudan en la anonimidad que da internet para dar rienda suelta a sus necesidades de descargar frustración y odio hacia la sociedad y el mundo.

El troll básicamente es una molestia y con el avance de internet, y las redes sociales, se convierte en un detrimento informático que día a día prolifera con facilidad.

Cómo influyen en el voto

Si bien en la mayoría de los casos los electores tienen su voto definido de cara a una elección, la realidad es que hay un amplio mundo de personas que, o tienen dudas, o simplemente están desencantados de la política.

A ese universo es al que apuntan los candidatos a la hora de utilizar cuentas falsas para darle entidad a una noticia o supuesta información que perjudique a su rival político.

A ello debe sumarse un hecho que cambió el eje, no solo de la información, sino de la toma de decisiones. Hay una parte de la sociedad que se alejó de los medios tradicionales de comunicación y se informa a través de redes sociales.

Se trata de un sector social que va creciendo, lenta, pero sostenidamente. Acaso ese fue el eje de un acalorado debate entre el libertario Ramiro Marra y el periodista Joaquín Morales Solá.

Es que, en parte, para la política es más conveniente que la gente se informe a través de las redes sociales, ya que son mucho más fáciles de controlar que los medios de comunicación tradicionales.

En tal sentido, el troll tiene un valor fundamental a la hora de entrometerse en la ideología política y en el voto de las personas, y es más que obvio que el recrudecimiento de la campaña contra de Daniel Orozco por parte de cuentas fake afectó el caudal de votos del ex candidato a gobernador Omar De Marchi.

Dicho de otra forma, estos trolls no se hicieron eco de la corrupción de Guaymallén, donde algunas de las acusaciones contra Marcelino Iglesias eran similares a las que se le hacían al intendente de Las Heras.

No solo ello, sino que este tipo de cuentas apuesta al “factor réplica”. Lo que hacen es generar indignación colectiva reposteandose mensajes entre sí para darle mayor volumen a la información que se quiera hacer viral.

De esta manera, el candidato con mayor cantidad de trolls será quien, en última instancia, tenga finalmente la mayor posibilidad de ganar una elección.

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