Hace casi tres años, en Diario Mendoza Today decidimos revelar las quejas de varias docenas de afiliados a la obra social CIMESA (Círculo Médico Salud), molestos por las carencias que sufren por parte de aquella firma.
Lo sintetizamos en cuatro puntos: desde hace meses, ninguna farmacia recibe las recetas de Cimesa, obligan a los afiliados a solicitar recetas todos los meses a sus propios médicos, y no tienen en cuenta las historias clínicas de los propios afiliados. Aparecen también muchos otros incumplimientos, de diversa índole.
Ello provocó dos situaciones: por un lado, se multiplicaron las personas que decidieron comunicarse con este medio para contar sus penurias, similares o peores que las ya reveladas. Por el otro, los abogados de CIMESA intentaron censurar lo aquí publicado. Una de las letradas que se quejó por lo publicado fue la Dra. Cejas, a quien se la derivó con nuestro representante legal, Alejandro Sánchez Kalbermatten.
En ese contexto, en el cual se intenta que no trascienda lo que se publicó en Mendoza Today, decidimos publicar media decena de testimonios en primera persona, con nombre y apellido, para exponer la realidad que viven los afectados en estas horas:
1.“Mi nombre es Miriam Fernández, soy una afiliada a CIMESA. Hace 30 años que pago religiosamente y hoy me encuentro prácticamente sin cobertura. Antiguamente teníamos el hospital Italiano, el hospital Español, la clínica Santa Rosa el hospital Santa Isabel de Hungría, médicos, dentistas, estudios clínicos para elegir. Hoy no la recibe nadie. La Superintendencia de salud no nos ayuda y nadie nos da una solución, mientras tanto seguimos pagando”.
2.“Mi nombre es Carmen Beatriz Salvó, mi marido es diabético, ingresa al hospital Italiano lo operan en la pierna izquierda cardivascular periférico. Luego le amputan un dedo mecrosado por falta de circulación, pasamos muchos problemas. Lo peor que en pleno tratamiento nos quedamos sin atención del Italiano. Gracias a la doctora que lo estaba atendiendo lo siguió curando pero entra una bacteria en el pie. Desde allí empezó el caos nadie se hace cargo nos derivan a otros lados, nos llevó un año. No damos más, con esta mutual pagamos y cada vez tenemos menos prestadores”.
3.”Soy afiliada de la prepaga CIMESA junto con mí esposo desde hace 30 años o más. En su época era una de las mejores prepagas de Mendoza. Ahora es un desastre y pagamos pero los servicios de Salud que prestan son inferiores al mínimo. Mí nombre es Thalia Tsallis. No tenemos servicio de urgencia ni médico a domicilio. Yo me tuve que afiliar aparte a ECI porque tenemos una edad crítica y no podemos tener una prepaga que no nos cubre una urgencia. No hay ninguna farmacia en Mendoza que acepte CIMESA. La farmacia propia nunca tiene nada y hay que pedir la medicación por Whatsapp y esperar. Otro problema es que los médicos que nos atendían años atrás y llevan nuestra historia clínica ya no reciben mas CIMESA. Nos sentimos cautivos y desamparados en lo que respecta a salud. Aclaro que nosotros tenemos El plan 100/100 y no tendríamos que pagar ningún coseguro ni nada”.
4.”Mi nombre es Elio Croce y quería expresarles mis malas experiencias con CIMESA. Hace mas de treinta años que estamos asociados con mi esposa la cual es la titular y mis 4 hijos que ya no queda ninguno como socios, por todos los problemas que tiene esta prepaga, la última mala experiencia hace un mes aproximadamente cuando llamé al servicio de emergencias a tiempo por un problema de presión alta (21 de máxima y 16 de mínima) contestandome que estaba suspendido el servicio por falta de pago por parte de CIMESA, llamo a la obra social y me confirman que efectivamente estaba suspendida y que estaban en vía de arreglo, que nunca sucedió hasta el día de la fecha, aconsejandome que me tomará un taxi y me hiciera atender en el hospital universitario, son unos estafadores porque los servicios son pésimos cuando los hay”.
5.”Mi nombre es Dalla Torre Oscar, mi esposa y yo somos afiliados a Cimesa desde los comienzos de la entidad. Estamos cautivos por la edad y por las enfermedades de base que tenemos. Carecemos de servicio de emergencia. Ninguna farmacia de Mendoza recibe recetas de Cimesa. Las Clínicas que nos reciben son las más precarias y no capaces de atender problemas de Alta Complejidad. Cada vez más profesionales de la salud rechazan la prepaga. La situación es muy alarmante y grave”.
6.”Soy Guillermo Mesina, soy afiliado yo y mi esposa, hace 27 años estamos pasando un situación muy mala con CIMESA, tenemos urgencias médicas domiciliarias, no tenemos farmacias que la reciban y los médicos en forma particular nadie la recibe, las clínicas que nos han dejado son las más precarias de Mendoza, cansados de que las autoridades no nos den explicaciones”.
Los testimonios aquí publicados, junto a tantos otros que han llegado a esta redacción, serán elevados a la Superintendencia de Servicios de Salud. También al Ministerio de Salud de la provincia.
Porque, como dicen los abogados, “a confesión de parte relevo de pruebas”.
