En estas horas, se libra una de las principales batallas políticas de Mendoza, que busca quedarse con el sello del PRO Mendoza. Allí se enfrentan dos personajes de alto vuelo: Omar De Marchi y Hebe Casado.
Ambos han conformado sus equipos y presentaron a algunos de sus integrantes. No a todos, para no abrir el juego por completo, pero lo que se ha visto hasta ahora permite presumir que algo raro ocurre en ambos espacios.
Por caso, el que aglutina al demarchismo aparece con ostensibles ausencias de referentes de La Unión Mendocina que acompañen a Gabriel Pradines para las elecciones del partido.
Dicen los que saben que aquellos “faltazos” se deben a las sospechas de que habrá una suerte de alianza entre el espacio de De Marchi y La Libertad Avanza, de Javier Milei.
“Yo tengo pensado mi desembarco en ese lugar, sí. Es el horizonte natural para muchos de nosotros”, dijo alguien del PRO a Diario UNO hace algunas semanas semanas.
Aquellos que no aparecen en la nómina son nombres fuertes: Germán Vicchi, Gustavo Cairo y Jimena Cogo; también el intendente Esteban Allasino, y su antecesor Sebastián Bragagnolo.
Respecto de De Marchi, hay voces que aseguran que habría comenzado a acercarse a Lourdes Arrieta, armadora de La Libertad Avanza local.
Oficialmente, todos niegan todo. Y no hay manera de confirmar nada finalmente, porque todos son runrunes. No obstante, como dice una vieja frase del saber popular, “cuando el río suena es porque agua lleva”.
