El incremento que se observa en el precio de la carne, se debe a un atraso en el valor de la hacienda vacuna. El aumento se dio en la segunda quincena de enero, llegó a las góndolas en febrero y por eso impacta ahora.
“No hay aumento, la información que ha estado circulando es en relación al impacto del aumento que hubo entre fines de enero y principios de marzo en la carne. Ese aumento que ya se produjo es del 60%, no quiere decir que pueda haber algún aumento más pero no va a ser tan grande como ese. Los grandes exportadores de carne se han puesto de acuerdo y no están convalidando más aumentos” explicó a Radio Regional de San Martín Edgardo Fretes, secretario de la Cámara de Industriales Abastecedores de Carne de Mendoza.
Acerca de nuevos aumentos, el secretario expresó: “Podemos llegar a ver momentos de reacomodamientos o inestabilidades como está pasando esta semana con las lluvias. Estamos teniendo en el centro del país muchas lluvias y eso hace que no se pueda entrar a los campos a sacar la mercadería o los animales. Cuando eso sucede hay algún retoque de precios”.
El referente realizó una proyección hacia fin de año y sostuvo que intervienen dos componentes importantes, uno es la hacienda y el otro los costos de producción y distribución.
“Esos dos componentes dependen muchísimo de los salarios, el combustible y los insumos. No podemos decir cómo se va a mover el mercado de acá en adelante pero todo lo que tenga que ver con los gastos es un reacomodamiento mes a mes. Generalmente la carne aumenta cuando aumenta la hacienda. También y en menor medida puede haber un reacomodamientos por la inflación en los costos de producción”.
Nuevo sistema de distribución
Una nueva medida establece que la salida de carne de los establecimientos solo podrán hacerse en trozos individuales que no superen 32 kg., eliminando así, la media res. El principal objetivo de esta medida tiene que ver con cuidar al trabajador al momento de descargar una media res, e implementar una descarga mecánica de la carne.
Sobre este sistema, Fretes comentó “Se ha puesto en funcionamiento en partes, no se puede transportar ni la media res completa, ni trozos que superen los 35 kilos. Como todavía no es totalmente aplicable porque el gobierno ha dado un plazo más largo todavía”.
Para implementar la infraestructura de descarga, los frigoríficos deberán invertir en un nuevo sistema, lo que traerá un aumento de costos, que a futuro se verá reflejado en los precios.
“Hay que armar las planchadas de carga, que es toda una infraestructura para poder hacer este cuarteo. Es como un tren al revés, ponemos vías en el techo y por esas vías van rondanas con ganchos de donde cuelga la carne. A eso hay que agregarle una infraestructura para que la operación del cuarteo no sea tan lenta”.
En cuanto a la adaptación de los camiones, señaló “En nuestra empresa, lo que hemos hechos es un brazo con un guinche eléctrico, le hemos puesto al brazo un malacate para que el operario no tenga que cargar el peso. Después para entrar la mercadería a la carnicería, hemos armado un carro de donde se cuelga la carne y eso tiene unas ruedas para que le operario no haga fuerza en ningún momento”. La medida surgió por presión de las ART, frente a las lesiones de los operarios.
