Ya no es novedad que el sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) fue uno de los que más creció durante la pandemia; más allá del impulso lógico del que partía. Así lo señaló el presidente del Polo TIC en Mendoza, Francisco Paco Bravo, al hacer un balance del año que se va y plantear los desafíos que presenta un 2022 con más preguntas que certezas.
En este sentido, y en relación al 2021 en contexto de pandemia, destacó la importancia de continuar con el desarrollo de un ámbito de amplio impacto: en la propia industria con el empleo calificado que conlleva, en la industria en general cuando se aplica tecnología para mejorar la eficiencia y productividad y en la economía de Mendoza en el sentido de que se abre un importante sector exportador.
Sin embargo, Bravo recordó que los desafíos persisten en vistas no solo del año próximo sino también del futuro en general. Se trata de la mala conectividad que tiene Mendoza; ubicada en el puesto 20 entre 24 provincias. Desde su visión, el Estado provincial debe insistir y cumplir con las mejoras, gestiones e inversiones ya planteadas pero aún sin ejecución con el fin de mejorar un aspecto básico que ya no se restringe al sector sino a toda la sociedad.
En este contexto, Bravo mencionó dos desafíos más que no pueden dejarse de lado en 2022 así como los avances realizados en el área de educación. El primer reto tiene que ver con sumar a toda la industria al mundo 4.0 pero no solo en lo que respecta a sus modos de producción sino también en la importancia de avanzar en la transformación digital en la gestión, administración y diversos procesos. Esto último incluye, también, a las empresas TIC.
La otra cuestión que hoy plantea interrogantes en el Polo TIC es el hecho de que muchos profesionales trabajan para empresas ubicadas en el exterior con el consiguiente sueldo en dólares. Y, si bien eso es algo bueno, lo cierto es que las firmas locales no pueden pagar salarios dolarizados a los valores actuales que –si se equipara- rondan los $400.000.
Por último, Paco Bravo comentó un punto favorable en el balance 2021 y se trata de la demanda de talento. Aunque aún es superior a la oferta, de a poco se han tomado medidas para favorecer la creación de profesionales especializados tanto desde la Provincia como desde el sector privado.
“Además de ingenieros, hacen falta desarrolladores de software, personas que sepan programar y formarlos tan pronto como se pueda”, subrayó el especialista al tiempo que destacó el programa “Mendoza Educa” del gobierno provincial que trabaja en este sentido así como la capacitación que los privados pueden hacer desde su lugar.
