A principios de diciembre de 2023, so pretexto de una investigación de Gendarmería Nacional, efectivos de la fuerza “rescataron” a 31 personas que eran víctimas de trata de personas con explotación laboral en una galpón de Maipú.
El procedimiento lo realizaron integrantes de la Unidad de Investigaciones de Delitos Complejos y Procedimientos Judiciales de Mendoza, quienes concretaron dos allanamientos en una casa y un galpón de empaque ubicado en Rodeo del Medio, Maipú.
Los uniformados aseguraron que habían recibido una serie de denuncias anónimas sobre la existencia de un caso de trata de personas, en esta instancia con fines de explotación laboral.
Hasta ahí, la noticia no tiene mayor relevancia, más que el hecho en sí, que siempre es relevante.
Sin embargo, hay una trama detrás de la trama, que denuncian diversos finqueros mendocinos. Juran que, no todos, pero sí muchos de esos procedimientos son falsos. Alegando una presunta situación de trata que no es tal.
Acusan a UATRE y Renatre, junto a una empresa llamada Reservin “con una gran experiencia en el campo de la fiscalización y la gestión de cobranzas”, según su propia página web.
Allí mismo aseguran brindar “soluciones integrales, eficaces y eficientes que potencian personas y organizaciones. Nuestro propósito es ser un actor relevante en la formalización del empleo en la Argentina y contribuir a la dignificación de los trabajadores”.
Aparece también en la trama Andrea “Pipi” Bouzo, delegada de la Región Cuyo de la Coordinación del Comité Ejecutivo contra la trata.
Como sea, la situación empieza a preocupar a los afectados, no solo por la violencia que sufren cada vez que suceden, sino también por el daño que les hace a nivel mediático.
Sin mencionar que suelen sustanciarse procesos judiciales engorrosos que los obligan a contratar abogados y pagar tasas de Justicia ad hoc.
Hay mucho ruido por lo aquí contado, el escándalo recién empieza.
