Cada vez es más frecuente “la presencia de alcohol” en accidentes en Mendoza y “los valores son sorprendentes”, según Saracco
El médico, ex presidente de la Sociedad Toxicológica Argentina indicó que “el tema del control es un aspecto mínimo en lo que hace a esta problemática”. Indicó que hay que tener en cuenta la salud mental y el consumo de sustancias.
Este lunes, Sergio Saracco, médico, magister en Toxicología, ex presidente de la Sociedad Toxicológica Argentina habló de la cantidad de conductores borrachos que hay en Mendoza a lo que Cornejo calificó como “epidemia social”.
“Por definición propia epidemia es cuando hay un aumento de casos por arriba de lo esperable y esto se viene dando en forma sostenida en el territorio provincial que no escapa a la realidad del país pero vemos como no solamente es cada vez más frecuente la presencia de alcohol en accidentes viales o al volante sino también los valores que se están encontrando que son sorprendentes, eso indica que va a existiendo una tolerancia al alcohol y eso es lo que hace tan grande y el peligro no solamente por accindentología sino todo lo que está asociado al alcohol que tiene que ver con aumento de riesgo de situaciones de violencia, practica de sexo no seguro, violencia sexual, también y el daño que va ocasionando a la salud de estos abusadores de alcohol”, sostuvo el experto en Radio Mitre Mendoza.
-¿Qué explicación encuentra a esto que estamos transitando?
–El tema del control es un aspecto mínimo en lo que hace a esta problemática porque estamos actuando sobre el problema, ahí es donde hay que empezar a tratar fuertemente sobre la situación que lleva a este tipo de consumo y acá tiene que ver, ya lo habíamos hablado en la pospandemia, era esperable los impactos que tienen en la salud mental y que a veces el consumo de sustancias está estrechamente asociado a estos conflictos en el área de la salud mental, en donde el consumo de sustancias se cae para mitigar parte de la situación psicológica social que tienen cada uno de los individuos, sobre todo aquellas que tienen un efecto más ansiolítico y deshinibitorio como es el alcohol, la marihuana, este tipo de consumo ayuda a mitigar, calmar estos cuadros de angustia, de ansiedad en donde le llamo esta especia de automedicación que encuentran en el consumo de estas sustancias que por lo menos la hace más llevable lo cotidiano, lo mismo con otros estimulantes como el caso de la cocaína o bebidas energizantes que también viene con un aumento muy importante que es lo necesario para enfocar y empezar la semana y por llevar adelante el pluriempleo y las grandes tensiones. Entonces esto hace, aparte del impacto sobre la salud de los usuarios, el impacto que vemos en el comportamiento cada vez más frecuente de violencia que vemos con casos de homicidios, robos violentos y accidentología que es una partecita de todo esto.
-¿Por dónde cree que deben tomarse las acciones en política pública?
-Lo fundamental es hablar del tema, si hacemos un análisis desde los años 90 son las últimas campañas que se hicieron en forma sostenida a nivel país en lo que era generar esta conciencia de cuál es impacto que tienen las sustancias, estas sustancias son prohibidas no por una cuestión meramente legales, por una cuestión de salud, son dañinas para la salud del usuario como es el tabaco que lo logramos detener después de campañas bien sostenidas pero vemos el impacto que va produciendo el consumo de alcohol en estos niveles, el tema de no estar presente y no mirar para otro lado cuando vemos que en el boliche se vende alcohol junto con bebidas energizantes que es un cóctel peligroso, porque enmascara el estado de embriaguez pero los reflejos están totalmente alterados por un sujeto que se siente fantástico y potenciado. Entonces ahí hay que hacer una política integral desde lo social, desde lo cultural y sin lugar a dudas desde la salud mental que en nuestro país y por la situación que venimos atravesando no son para nada halagüeña y ahí es donde tenemos que tener un sinfín de acciones que tienen que ser sistemáticas, mantenidas y donde tenemos que estar toda la sociedad involucrada.
-¿Esto se está trabajando en las escuelas, en las infancias?
-Las futuras generaciones, qué estamos haciendo para generar conciencia en lo que hace a consumo de alcohol y otro sustancia durante el embarazo, no hay cartelería ni nada, ven cualquier película americana en otra parte del mundo y claramente está presente que cuando alguien está embarazado no toma alcohol y se sorprenden si alguien está tomando alcohol durante el embarazo, acá no existe nada y esto tiene que ver con que esta exposición neurotóxica daña las capacidades cognitivas intelectuales de ese niño que estar por nacer, ni hablar de la otra sustancia como marihuana y cocaína. El alcohol que es más prevalente por ser legal y que nadie advierta a esa persona gestante lo que le está haciendo al futuro de ese niño, después nos vemos preocupados con los resultados a nivel académico, a nivel laboral que eso es lo que más preocupa. No es el aquí y ahora, si no veo unos 15 años adelante y es cómo hacemos para empezar a proteger los futuros niños y adultos que tengan las capacidades cognitivas plenas para poder estar en ese mundo que es cada vez más competitivo.
-El tema de tolerancia cero, algo que se discutió a nivel nacional, donde se ubica Mendoza ¿Cómo su posición en este sentido?
–Tenemos que tener un mensaje claro, como sociedad tenemos que tener esta tolerancia cero al consumo de alcohol y otras drogas en el embarazo, la lactancia y niñez y en situaciones de riesgo como conducir vehículo. Después lo que se puede discutir es cuál es el valor de corte de la alcoholemia, esa es una discusión técnica científica para ver cuál es el valor, yo no coincido con el cero absoluto por cuestiones técnicas, pero sí no podemos minimizar para sacar cuentitas de cuánto hay que tomar para que no me hagan la multa, acá hay que tener claro que a la hora de conducir o tener otras situaciones de riesgo, al igual que embarazo o lactancia, la tolerancia que tenemos que tener como sociedad es cero. Tenemos que ir a una tolerancia a no ir viendo como natural situaciones que son de alto riesgo.
-Una persona que consume una copa de vino, un trago, ¿es aceptable, está dentro de ese rango de 0,5?
-La tolerancia debe ser cero como sociedad. Caemos otra vez en lo mismo, ¿Cuánto puedo tomar? Y depende de cuánto pesa, si el estómago está vacío, generalmente ese rango de una copita, me siento bien y me tomo otra mas, no lo entendimos. La tolerancia debe ser cero. Si soy conductor, ese día no consumo.