El arquitecto de la cancha de Independiente desmintió un peligro de derrumbe

Alejandro Castro aseguró que "no hubo ningún tipo de fisura o fractura".

El arquitecto del estadio de Independiente, Alejandro Castro, aseguró que la tribuna Pavoni baja no sufrió un peligro derrumbe y que se trató de “un desplazamiento”. También remarcó que esto no es la primera vez que sucede.

La polémica y preocupación se instaló en el club de Avellaneda luego de que se hicieran virales las imágenes del estadio Libertadores de América, donde se puede ver que una de las tribunas populares estaba corrida de lugar.

La imagen obligó a los dirigentes del Rojo a emitir un comunicado oficial para desmentir algunas versiones que circularon en las últimas horas, como por ejemplo que se trataba de un posible peligro de derrumbe.

Posteriormente, quien tomó la palabra fue el arquitecto de la cancha, el mismo que planificó la remodelación en 2005.

“Cada grada es un módulo de cinco escalones que están plantados en dos vigas, una de cada lado. Las vigas tienen 60 centímetros y estas gradas apoyan 30 centímetros de cada lado. Dos de las gradas sufrieron desplazamientos, uno de cinco y otro de dos centímetros“, explicó Castro en declaraciones radiales.

Y remarcó: “No hubo ningún tipo de fisura, fractura o daño estructural en los dos elementos. Tampoco de caída o de derrumbe. Quedarán reparados entre hoy y mañana. Estamos haciendo un chequeo de por qué sucedió. El año que viene el estadio cumple 20 años”.

En la misma línea, Castro explicó que no es la primera vez que ocurre algo de esta magnitud con el sistema premoldeado del Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini, el que también tienen el Único Madre de Ciudades, de Santiago del Estero, y el de La Plata.

Pasó hace un año, cuando se desprendió otra soldadura. Este sistema es seguro. Tenemos todo a disponibilidad para que mañana se hagan las verificaciones. Queremos transmitir tranquilidad al socio de que esto no generó ningún tipo de riesgo ni lo va a generar a futuro“, profundizó.

“Las dos tribunas estaban llenas, pero no había más gente de la capacidad permitida. Detrás del arco podría aparecer más riesgo en caso de movimientos y, sin embargo, las juntas están perfectas. Hoy revisamos todas las tribunas por las dudas“, sentenció.

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