Quién es el misterioso espía “Máximo”, que permanece escondido en la trama del triple crimen de General Rodríguez
Por Christian Sanz, director periodístico de Diario Mendoza Today.
Su figura aparece en diversas partes del expediente que investiga el triple crimen de General Rodríguez, ocurrido en agosto de 2008. Le dicen “Máximo”, pero nadie jamás pudo establecer su identidad real.
La investigación refiere al luctuoso hecho mafioso que dejó sin vida a los jóvenes Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina.
La autoría material ya fue establecida y sus ejecutores terminaron tras las rejas. No así la autoría intelectual. Básicamente porque la Justicia no se anima a avanzar sobre la figura del oscuro Aníbal Fernández, dueño y señor del narcotráfico en la Argentina.
Como sea, en la voluminosa causa judicial aparece mencionado de manera insistente el tal “Máximo”, sin más referencia de que se trataría de un agente de Inteligencia, al cual habrían visto en más de una oportunidad junto a Martin Lanatta, hombre de Aníbal.
También aparecen contactos entre el teléfono de “Máximo” y Josue Fuks, un empresario farmacéutico que se profugó a Israel tras ser puesto bajo la lupa por vender grandes dosis de efedrina.
En tal contexto, según pudo averiguar Diario Mendoza Today, detrás de Máximo se esconde la figura de un hombre llamado Ricardo Alberto Escudero, nacido el 3 de marzo de 1953. El dato fue confirmado por fuentes judiciales a este medio.
No obstante, su relevancia es concreta y elocuente, porque es uno de los personajes centrales de la trama. Que lleva a lugares inquietantes: ¿La AFI fue parte de la operación que derivó en la muerte de los tres empresarios?
Es una posibilidad que deslizaron un par de testigos del caso. Uno de ellos fue el propio Lanatta, quien jura que se trató de un crimen organizado por Aníbal y agentes de la exSIDE.
Solo restaría saber por qué la jueza María Romilda Servini jamás avanzó sobre la figura de Máximo, ni tampoco sobre el ex ministro de Seguridad de la Nación.
Por el contrario, la magistrada sólo se ocupó de echar tierra sobre este periodista y exponer a sus fuentes de información a través de un innecesario oficio rubricado hace algunos años.
“Servini es amiga de Aníbal, hace todo lo que él le pide”, dijo a quien escribe estas líneas uno de los funcionarios judiciales que supo llevar a cabo la investigación de marras.
Uno decidió no creerle. Pero se ve que era cierto nomás.