La visita a represores en la cárcel desató la interna libertaria: pases de factura en grupos de WhatsApp y la “cama” a Arrieta
Una delegación de diputados del oficialismo se entrevistó con criminales de lesa humanidad como Astiz y Donda en esa cárcel federal para analizar estrategias tendientes a lograr prisiones domiciliarias para exmilitares y exagentes de inteligencia que tiene más de 70 años.
Como trascendió en las últimas horas, cinco legisladores nacionales de La Libertad Avanza (LLA) se reunieron el jueves de la semana pasada en el penal de Ezeiza con criminales de lesa humanidad condenados por hechos de represión ilegal cometidos durante la última dictadura militar que pretenden ser beneficiados con arrestos domiciliarios por haber superado los 70 años de edad.
Se trata de un episodio más de la ofensiva negacionista sobre los delitos perpetrados por el Terrorismo de Estado en los años ’70 que la administración libertaria impulsa desde el inicio de la gestión del presidente Javier Milei. La visita de estos legisladores está en línea con discursos pronunciados por el Presidente y la vicepresidenta, Victoria Villarruel, de aceitados vínculos con represores condenados desde la reanudación de los juicios de lesa humanidad.
Además, esta concepción del Gobierno se aleja de las políticas concretas contra la línea de Memoria, Verdad y Justicia que sigue el Estado argentino desde hace más de 20 años, con desmantelamiento de organismos y despidos en áreas diversas áreas del Estado.
Según pudo confirmar el portal Data Clave con fuentes oficialistas, la visita de los diputados nacionales se produjo el 11 de julio en el penal de Ezeiza donde se encuentran detenidos represores como Alfredo Astiz, Raúl Guglielminetto y Carlos Suárez Mason, hijo de Guillermo Suárez Mason, jefe del Primer Cuerpo de Ejército durante la última dictadura.
La delegación libertaria que se hizo presente en la cárcel federal estuvo integrada Beltrán Benedit, Lourdes Arrieta, Alida Ferreyra, Guillermo Montenegro (uno de los dirigentes que estuvo muchos años cercano a Villarruel) y María Fernanda Araujo. En la reunión estuvieron presentes otros represores del centro clandestino de detención ilegal que funcionó en la ESMA y exagentes de inteligencia, todos sentenciados por delitos como secuestros, asesinatos y robos de bebés.
Uno de los participantes del encuentro fue el marino Adolfo Donda, quien recientemente fue condenado por la apropiación de su sobrina, Victoria Donda, exfuncionaria y actual legisladora del Parlasur. Voceros de LLA confirmaron la visita y aseguraron que en las próximas horas difundirían un comunicado confirmando el hecho, que ayer fue referido en el portal La Política Online.
Organización del viaje y motivos de la excursión
Algunos de los participantes de esta incursión en el penal de Ezeiza aseguraron que el motivo era visitar a excombatientes de Malvinas, entre ellos Astiz, que se rindió en las islas Georgias sin disparar una sola munición a sus colegas de la Royal Navy. Lo calificaron internamente como una “visita humanitaria”.
El motivo de la reunión habría sido comenzar a diseñar estrategias para lograr que algunos genocidas empiecen a recuperar sus libertades, algo que desde hace años viene impulsando Villarruel. Mencionan causas armadas por los mismos terroristas de esos años, presos sin condena y que no se respetan tratados internacionales. “Vamos al rescate del imperio de la ley con espíritu de Justicia”, aseguró el diputado entrerriano a sus pares.
Esta visita no es un hecho inédito en la vocación negacionista que exhibe el gobierno libertario de Milei. En marzo de este año, funcionarios del Ministerio de Defensa que encabeza Luis Petri se hicieron presentes en el penal de Campo de Mayo, donde están alojados varios represores condenados.
La delegación de la cartera de Defensa estuvo encabezada por Lucas Miles Erbes, director nacional de Derechos Humanos de ese Ministerio.
La comitiva se entrevistó en el penal con Juan Daniel Amelong, un célebre represor del Segundo Cuerpo de Ejércit que tiene varias condenas por delitos de lesa humanidad y fue descripto como “una víctima” por Villarruel en el debate televisivo que mantuvo con Agustín Rossi, en la campaña electoral del año pasado.
Este exoficial del Ejército torturó, secuestró y mató en el Destacamento 121 de Inteligencia con sede en Rosario, y la Cámara de Casación Penal rechazó recientemente un pedido formulado por su defensa para acceder al beneficio de la libertad condicional.
Pelea en el grupo de WhatsApp del bloque
El diputado libertario por Entre Ríos, Beltrán Benedit, es el organizador de la visita. Internamente apuntan a la mano derecha de Martín Menem, Shariff Menem, sobrino y secretario personal del presidente de la Cámara de Diputados. Fue el encargado de armar la logística y permisos para entrar al penal.
Desde el interior de la bancada, no todos los que conformaron la combi estaban avisados de ante mano el motivo del viaje. Rocío Bonacci se pelea cuando están llegando al penal con Beltrán porque no le advirtió, ni el jefe de bloque Gabriel Bornoroni tampoco. Aseguran que le hicieron una cama a ella y a Lourdes Arrieta, la diputada por Mendoza, que tampoco sabía.
Conocida la información, comenzó una cacería de brujas interna que el propio Beltrán disparó. “Fuimos 6 no 5 como dice LPO, alguien paso la información? yo no”, preguntó y agregó: “La verdad y la lealtad son requisitos indispensables para quienes queremos permanecer en LLA”. Al instante, Alida Ferreyra, recordó que no es el primer viaje con este motivo ya que fueron en marzo a Campo de Mayo y nadie se enteró.
Por último, una de las ofendidas, la mendocina Arrieta, recolecta un tuit del periodista Juan Luis González, autor de la biografía de Milei donde difunde un mensaje de Beltrán dando explicaciones del viaje. “Esto no se hace… falta de gallardia”, explotó la diputada. La interna en LLA, arde.