Por el aumento de prepagas, en Mendoza se registró un incremento del 15% de las atenciones en hospitales públicos
Se advierte una migración de las prepagas a la medicina social y pública, pero en distritos como el bonaerense, también el dengue presiona en las guardias. En julio se reacomoda todo.
La medicina privada lleva encarecido este año un 40% por sobre la inflación, mientras al menos 3% de afiliados de prepagas se pasaron a la salud pública, en Mendoza y otras provincias.
No obstante, las guardias de los hospitales, la gran mayoría dependiente de las provincias y municipios, reciben cada vez más casos, con o sin cobertura de obra social.
Según Agencia NA, aunque no hay estadísticas recientes que los cuantifiquen, a priori una conclusión que se escucha en los nosocomios es que hay una creciente transferencia de los que optaban desde la obra social por una prepaga, y debido al incremento de más del 150% en las cuotas, se pasaron a la órbita estatal o sindical.
PAMI es un caso en el que esa migración no redundó en un crecimiento de afiliados como de volumen de atenciones a jubilados que en su momento habían preferido asociarse a las empresas de salud privada pero en estos meses, al tornarse inalcanzable la mensualidad, se quedaron con la obra social por derecho adquirido dentro del sistema previsional.
La mejora en el servicio de PAMI para con sus 3,5 millones de adultos mayores que tienen la cobertura, lo mismo que en general se advirtió en los hospitales públicos, hizo que no sintieran el traspaso como un desamparo..
Obras sociales
El año pasado, la torta de la salud se repartía en: 36% hospitales (en ascenso), 60% clínicas sindicales, 13% prepagas (ahora habrían bajado a 10%) y 10% combinación de sistemas.
En la Ciudad de Buenos Aires, se advierte mayor movimiento en los hospitales locales, pero no tanto como para comprometer el servicio.
De todos modos, la demanda subió y amenaza con hacerlo más aún si la economía no reacciona, si el salario no se recupera y si aparecen brotes, como sucede en la provincia de Buenos Aires con el dengue.
Por las guardias de los 46 hospitales bonaerenses desfiló en abril un 18% más que en el mismo mes del año anterior, 212.877 en total, por cuestiones económicas pero también por los casos de dengue que se presentan a diario.
El boletín Epidemiológico Nacional los registró en lo que va del año, lo mismo el año pasado, una baja de todas las enfermedades respiratorias de notificación obligatoria y un aumento de casos de dengue, más de 180.000 casos, y 130 muertes desde julio de 2023.
Es cierto, asimismo, que pese al frío, no hubo como otros años enfermedades broncorrespiratorias masivas que requirieran la intervención de los centros médicos.
La infraestructura hospitalaria, con todo, es de las mejores pertrechadas del continente.
Argentina se sitúa como el cuarto país de Latinoamérica y el Caribe con mayor número de hospitales (3000), camas (118.000), quirófanos (3300) y médicos (4 por cada 1000 habitantes).
Cuenta también con la mayor densidad de camas hospitalarias por población en Latinoamérica y el Caribe (5.2 cada 1000 habitantes) y la inversión en salud representa el 10% del producto bruto nacional (cifras del 2020).
Prepagas
En provincias como Mendoza, también se registró un incremento del 15% de las atenciones en hospitales públicos, atribuido por fuentes del Gobierno provincial a que hubo mucha gente que se bajó de las prepagas y otros porque no tenían algunas especialidades en sus cartillas, que se cubrieron en los nosocomios.
En un informe publicado en Clarín consignan la posición de los funcionarios, quienes resaltan que el sistema de salud público no brindaba buenos servicios al arrastrar problemas de financiamiento y funcionamiento, lo que hizo que los jubilados que pudieron hacerlo se volcaran a las prepagas en busca de una mejor atención.
En el Ministerio de Salud de la Nación señalan que actualmente se produjo una reversión hacia el sector público, ya que se propició una mayor y mejor competitividad con el objetivo de mejorar la calidad de las prestaciones tanto desde el sector privado como en el sector público.
Destacan asimismo que se redefinieron las competencias de los Estados nacionales y provinciales, y se hizo más eficiente la gestión del PAMI, volcando todos sus recursos a mejorar sus prestaciones en beneficio de los jubilados.
Quedaría un mes más de ajustes en la carrera entre cuotas e inflación que podrían determinan un éxodo mayor de afiliados de prepagas o un reacomodamiento de los planes a los mixed que promocionan combinando coberturas diferenciadas y copagos.
También de una generalización de los vouchers de salud podrían surgir alternativas de asociación, sobre todo regionales, que redistribuyan afiliados.