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Zamarbide cruzó a Milei: “Permitir la libre portación de armas es una estupidez que no se basa en evidencia”

El ex diputado mendocino explicó que "los países desarrollados tienen políticas restrictivas de acceso a armas, excepto EEUU".

Tras conocerse que Javier Milei postula la libre portación de armas en caso de llegar a presidente de la Nación, el ex diputado nacional por Mendoza, Federico Zamarbide, salió a refutarlo en sus redes sociales.

“Durante unos años fui legítimo usuario de armas de fuego porque practicaba tiro al blanco. La idea de permitir la libre portación de armas es una estupidez que no se basa en evidencia“, arrancó el otrora legislador.

Y añadió: “El acceso a armas de personas inexpertas podría generar que una discusión de tránsito termine con un muerto. O cualquier otro hecho que sin armas hubiese generado a lo sumo una pelea con golpe de puño podría desencadenar una fatalidad. La evidencia nos muestra que quienes poseen armas en su hogar como medio de defensa y no tienen la instrucción necesaria para operarla tienen más posibilidades de generar un accidente doméstico que repeler un ataque de un delincuente”.

Para Zamarbide, “es mucho más probable que un delincuente en ocasión de robo “vaya jugado” y dispare si detecta o sospecha que la víctima del delito tiene un arma. Los países desarrollados tienen políticas restrictivas de acceso a armas, excepto EEUU, donde no han logrado disminuir los accidentes domésticos, ni las tragedias generadas por enfermos psiquiátricos”.

El ex diputado explicó que es por eso que en EEUU “cada vez son más las voces que plantean modificar la legislación. Los casos de personas que necesitan un arma por motivos de seguridad (ej, gente que vive en ámbitos rurales y puede sufrir intentos de robo) son contemplados actualmente y pueden constituirse en legítimos usuarios“.

Finalmente, el mendocino explicó: “La libre portación se propone más por dogma que por sus beneficios para la seguridad ciudadana. La demagogia no es un patrimonio exclusivo de la izquierda, sino de quienes plantean teorías que, si no se ajustan a datos, evidencia y estadísticas, construyen relatos para mostrar la realidad tergiversada, en lugar de ajustar sus teorías y replantear sus dogmas”.

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