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🤨 “¿Qué tan boludos impositivos somos?”: qué hay detrás de los afiches que aparecieron en Mendoza

Una ONG lanzó una campaña en las principales ciudades del país para generar “concientización fiscal”; la Argentina, tomando la actividad formal, es el país más gravoso del mundo.

“¿Qué tan boludxs impositivos somos?”. La inquietante pregunta se lee en puntuales carteles que se dejan ver en Mendoza y otros distritos del país como la Capital Federal, Rosario y Córdoba.

La idea es de “Lógica”, una ONG creada por un grupo de empresarios que quiere trabajar sobre la concientización fiscal. “Somos campeones del mundo en presión fiscal real. No solo trabajamos en impuestos, es el trípode de gasto público, impuestos e inflación”, dijo a diario La Nación Matías Olivero, director de la ONG.

Olivero, tributarista él, subraya que la causa originaria del problema es el “gasto público descontrolado; por eso se necesitan no solo los impuestos más altos del mundo, sino que se requiere de la cuarta inflación más alta del mundo. Ambos pegan en la góndola, en el bolsillo de los argentinos”.

Los ejemplos que toma “Lógica” son de diferentes consultoras y entidades: 50,3% en el precio final de una remera66% en el de un teléfono móvil41,9% promedio en un alimento y 48% una bebidaNo hay una promoción de rebelión fiscal en la campaña, sino la intención de que haya más conciencia de lo que se paga en carga tributaria y de que hace el Estado con ese dinero.

El tributarista Enrique Lingua graficó a La Nación que en general “no se tiene conciencia de lo que paga en impuestos. Cuando hablamos de la que la presión tributaria llega casi al 40% del PBI, no se entiende”. Grafica que, por ejemplo, las facturas de los servicios se miran sin detenerse que hay “una explosión de impuestos”; hace esa referencia porque -en esos casos- sí está discriminada la carga.

“La combinación es entre el costo tributario que debe soportar la ciudadanía y la percepción de lo que está recibiendo a cambio -describe el tributarista Guillermo Poch-. En la región estamos altos pero por debajo de Brasil. Desde 2019 que viene aumentando. El punto es que hay que contratar medicina prepaga, muchos también colegios privados para los hijos; hay inseguridad. Entonces, en la devolución por parte del Estado de los impuestos, es muy baja y, para los sectores informales, la presión tributaria no existe”.

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