Christian SanzMendoza en foco

🤔 Mendoza, gobernación ¿y después? Qué será de la vida de Rodolfo Suarez cuando culmine su mandato

El mandatario mendocino aún no sabe qué será de su vida cuando termine la gobernación provincial. Por un lado, quiere seguir en la actividad pública; por el otro, muestra cierto hartazgo.

Cuando Alfredo Cornejo culminó su mandato, en 2019, logró hacerse con un oportuno conchabo, como legislador nacional por la UCR. A su vez, dejó a alguien de su riñón a cargo de la gobernación de Mendoza, Rodolfo Suarez.

La jugada fue brillante, porque ahora, cuando le toca volver al redil, se encuentra con el camino despejado para “mojar” por segunda vez como mandatario provincial.

Ciertamente, no existen antecedentes de una movida semejante. Aquellos que ocuparon el célebre Sillón de San Martín jamás vuelven a la gobernación provincial.

Más aún, la mayoría termina arrumbado en algún lugar perdido de la memoria colectiva de los mendocinos. Unos pocos logran trascender, pero son contados con los dedos de una mano. Apenas sí Julio Cobos, José Octavio Bordón y el mencionado Cornejo.

Luego, hay alguno que otro que consiguió algún curro en el Estado, como Arturo Lafalla y Celso Jaque. Pero la mayoría, como se dijo, está destinado al olvido total.

¿Será acaso el destino de Suarez? ¿Volver al ingrato llano? ¿O ingresará al Congreso Nacional como senador por 4 años, tal cual le “regaló” un fallo la Corte Suprema en 2021?

Cuando se lo preguntan, el hoy gobernador asegura que su destino no lo inquieta ni mucho menos, que de ser necesario volverá a la actividad privada, como abogado. A tal respecto, pocos saben que ostenta un posgrado en Responsabilidad Civil y es especialista en Derecho de Daños.

No obstante, Suarez no se decide: una parte de él quiere seguir en la actividad pública, no sabe bien dónde, pero el corazón se lo pide. Es como un boxeador que no se decide a colgar los guantes.

Sin embargo, otra parte de su ser prefiere volver al llano, sobre todo tras el desgaste de haber transitado por tantos cargos y haber descuidado a su familia. “A ello se los debo”, suele decirse a sí mismo.

Para los menos memoriosos, antes de ser gobernador Suarez fue secretario de Bloque en la Honorable Cámara de Diputados entre 1995 y 1997; apoderado jurídico de la Municipalidad de Tupungato entre 1997 y 1999; asesor Letrado en la Cámara de Diputados de la Provincia a partir de 1999; apoderado General de la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza entre 2004 y 2007; concejal capitalino a partir de 2009; y asumió como intendente tras la muerte repentina de Víctor Fayad. Como se dijo, ha recorrido un largo camino.

No obstante, no está dicha la última palabra. El futuro de Suarez aún no está escrito. O sí. Acaso sea como dijo alguna vez William Shakespeare: “El destino es el que baraja las cartas… pero nosotros somos los que jugamos”.

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