Nicolás SanzPortada

Un relato del destrato mendocino en primera persona: un expediente complejo que avanza sin que a nadie le importe

La denuncia la hizo una ex empleada del Área Departamental de salud del departamento de Las Heras

Una situación particular se da en estas horas el área de Salud del departamento de Las Heras, según relató Olga Claudia Montero a Diario Mendoza Today. Se trata de una mujer que hoy está jubilada y quien supo trabajar 33 años para el Estado Provincial.

“Era Trabajadora social del Área Departamental de salud de Las Heras, que depende del Ministerio de Salud de la Provincia de Mendoza. Trabajé durante 33 años para el gobierno de Mendoza, y en el área de salud de Las Heras estuve 6 años”, comenzó contando la mujer.

En ese mismo sentido aseguró que nunca había tenido que protagonizar la impunidad que vivió en ese lugar, “nunca sufrí tanto maltrato laboral”, contó. “En este lugar, quien lleva las riendas no es el Coordinador del Área sino su administrador que se llama Ernesto Fortuño”, continuó detallando.

Según Montero, en el año 2018 se hizo cargo de la población de Polvaredas, en alta montaña, y gastaba, en ese momento, unos 1.000 pesos cada vez que asistía al trabajo. “En oportunidad de ir a solicitarle al Sr Ernesto Fortuño el pago de la movilidad me respondió que a nadie le pagan el pasaje para ir a trabajar”, relató, por lo que contó que debió dejar de cumplir sus funciones.

Asimismo, la mujer denunció que para poder adquirir comodidades mínimas tales como ventiladores o sillas “se usaban los fondos provenientes del programa ‘sumar’, programa de la nación, que consta en cargar en una base de datos la atención de pacientes y por ello la Nación paga un monto según la especialidad y la atención que se realice”.

En otras palabras, asevera que si no se producía, el lugar de trabajo era lo más parecido a una “pocilga”. Así es que contó que también lo vivió en el centro de salud 221 del barrio Democracia. “Allí el último tiempo no teníamos ni baño, debíamos pedir el baño a la vecina, porque estaban tapadas las cloacas, rotas las paredes. El ginecólogo atendía en un cuarto hecho con gabinetes de archivo y de puerta una cortina”, dijo.

En tal contexto, comentó que para el Gobierno de la provincia “fue mejor cerrar el centro de salud argumentando el mal estado legal de los papeles de la propiedad, antes que hacer todo lo concerniente para dejarlo en condiciones, dejando a toda una población sin atención médica”.

“Durante la pandemia nos destruyeron emocional y físicamente, porque si bien trabajamos 14 días por 14 de descanso, en esos 14 días de trabajo debíamos devolver las horas que no íbamos a estar trabajando, lo cual implicaba un estrés terrible en virtud de lo que se vivía en ese momento, todo esto ordenado por Ernesto Fortuño, el administrador”, fustigó dejando en claro que nunca se le mostró un decreto del Gobierno, ni de parte de Rodolfo Suarez ni de parte de la ministra Ana María Nadal.

Olga se jubiló el 12 de mayo del 2022 a raíz de un accidente laboral, por lo que comenzó a hacer los trámites para lograr percibir dinero que le debían, en ese momento algo así de unos 100 mil pesos.

“Para que el Jefe de Personal del Área departamental de salud de Las Heras iniciara el expediente para el pago, tuve que enviar, después de pedirle muchas veces, un telegrama laboral e intimarlos con inicio de acciones legales” explicó a este medio y confesó que “recién allí en el mes de junio le dan inicio al expediente” número 04054012/2022. “Los empleados de las distintas oficinas me han tratado mal y varios me dijeron que tengo suerte que mi expediente se mueva porque hay empleados que fallecieron en la pandemia y todavía los familiares no logran cobrar sus vacaciones y los seguros”, añadió.

Lo que denunció más específicamente la mujer es que el pago de sus vacaciones, por el monto de unos 100 mil pesos, está presupuestado para el año 2022 pero que nunca lo cobró, por lo que se pregunta quién se quedó con ese dinero.

“Por otra parte, tienen retenido desde hace más de un año otro expediente de pago. Yo me jubilé trabajando en zona rural, en el centro de salud número 22 de El Pastal, dependiente del Área departamental de salud de Las Heras, y ante el pedido de pago de la zona, avalado por el director del Centro de Salud, el expediente ingresa y se queda retenido en el área de salud sin darle curso por más de un año”, agregó a su denuncia.

Por tanto, apuntó contra el ex gobernador Alfredo Cornejo, y el actual Rodolfo Suarez, al mencionar una “clara malversación de fondos públicos”. “El pago de mis vacaciones es algo ínfimo en dinero para ellos, pero para mí representa el pago del tratamiento que me hago en las piernas que me quedaron mal en el accidente de trabajo, y el cual la obra social no cubre y lo necesito para poder caminar con un poco menos de dolor”, fustigó.

Claramente aquí hay una malversación de fondos. Alguien en el camino se quedó con mi dinero, el que me corresponde por ley”, culminó. Ante esa situación sumó su reclamo a páginas web, pero el Gobierno provincial no hizo nada para poder solucionar el problema, remarcó.

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