PolíticaPortada

Cornejo sin filtro: la interna de Juntos por el Cambio, Aerolíneas Argentinas, Milei y ¿volverá a pelear por la gobernación mendocina?

El ex gobernador mendocino habló del fenómeno Milei, las internas en la oposición y las elecciones de cara al 2023. Por Sebastián Hadida, TN.

El jefe del interbloque de Juntos por el Cambio en el Senado, Alfredo Cornejo, tomó distancia de quienes dentro de la coalición opositora buscan tender puentes con el líder de La Libertad Avanza, Javier Milei, al sostener que el diputado liberal es “una expresión de la bronca” y de la “antipolítica”, por lo que “no ofrece garantía de gobernabilidad a futuro”.

Pese a mostrarse en los últimos tiempos cercano a Mauricio Macri y a Patricia Bullrich, exponentes del ala PRO que busca establecer puntos de contacto con el movimiento liberal, el radical mendocino lo quiere a Milei bien lejos de Juntos por el Cambio, al señalar que “la antipolítica genera un escenario de inestabilidad“.

En una entrevista exclusiva con agencia Noticias Argentinas, Cornejo no descartó ser candidato en 2023, y dijo que su aspiración es “influir a nivel nacional” en el armado de Juntos por el Cambio.

No obstante, aclaró que no es éste un momento de candidaturas, y que esas “competencias adelantadas” entre figuras de la coalición opositora, como la que mantienen de forma brutal y a cielo abierto Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, están provocando “inconvenientes” en la imagen de unidad de Juntos por el Cambio.

“Es cierto que no hay ningún candidato del radicalismo que esté por encima de los dos o tres del PRO”, reconoció el senador, aunque remarcó que aún “hay tiempo para empoderar a una figura propia“.

– ¿Las candidaturas en JxC deben ser puras de cada espacio o cruzadas entre el PRO y la UCR?

– Creo que tienen que ser cruzadas. En 2021 Juntos por el Cambio presentó competencia interna en 17 distritos, y de ellos en 16 hubo listas combinadas con radicales y dirigentes del PRO. El resultado fue que en todas ellas hicimos mejor elección en las generales que en las PASO. Esa conducta se va a repetir en 2023.

– En las encuestas no aparece ningún radical en los primeros lugares ¿la UCR debe presentar un candidato a presidente propio?

– Es cierto que no hay ningún candidato del radicalismo que esté por encima de los dos o tres del PRO. Yo atribuyo eso a que en realidad no hubo el suficiente “affectio societatis” en el radicalismo como para empoderar a uno. No ocurrió, ya sea porque no nos pusimos de acuerdo, o porque nadie se destaca por encima de nadie en materia de encuestas. De todas maneras, hay tiempo para empoderar a una figura propia, y además si uno mira las encuestas no hay ningún candidato a presidente en Juntos por el Cambio que se haya recortado por sí solo. Yo creo que el radicalismo tiene cosas para mostrar en las gestiones de sus gobernadores y ex gobernadores, como humildemente creo que es mi caso.

– ¿Podría ser candidato en una fórmula presidencial en 2023? ¿O analiza volver a su provincia?

– Tengo la vocación de influir a nivel nacional porque los principales instrumentos de política económica están en la Nación. Las buenas administraciones provinciales tienen el límite de que los cambios económicos y sociales dependen mucho más de la macro que se administra desde el Gobierno nacional. Sí creo que no es un momento de candidaturas. Eso está generando inconvenientes incluso en nuestra fuerza por competencias adelantadas de candidaturas. Yo creo que deberíamos estar concentrados en el programa de Gobierno, de manera tal de que cualquiera sea candidato, haya un plan unificado que dé certidumbre a la Argentina.

– ¿Se puede articular un programa común con miradas tan diversas dentro de JXC?

– Estamos bastante más cerca de lo que se cree en materia de diagnóstico y propuestas entre el PRO y la UCR: Las discusiones no necesariamente son entre el PRO y la UCR sino PRO contra PRO y UCR contra UCR. Hay miradas diversas pero todas en el marco de una mayor coherencia que la que tiene el Frente de Todos. En el Frente de Todos se unieron al solo efecto de conquistar el poder y se mantienen unidos para no perder el poder. Pero en el Frente de Todos convive gente que no cree en el derecho de propiedad con gente que sí cree en el derecho de propiedad, como Juan Grabois y Sergio Massa. Es un derecho fundamental del Estado de Derecho. En Juntos por el Cambio no vas a encontrar alguien que tenga una diferencia de ese tipo. Sí podés encontrar gente en JxC que cree que el Estado no debe intervenir en nada y los mercados deben funcionar libremente. Son los menos. En el PRO y la UCR se ven posiciones de mucho pragmatismo a la hora de encarar los problemas económicos. El debate no es si se interviene o no, sino el grado de intervención del Estado en la economía.

– ¿Qué hay que hacer con Aerolíneas Argentinas?

– Si se profundiza la crisis, hay varios modelos. Vender la empresa es un uno, y otro es un gerenciamiento privado sin perder la propiedad de la empresa. Tanto de una forma como de la otra se podría hacer que la empresa sea competitiva y que no genere un gasto tan grande al Tesoro Nacional.

– ¿Cómo analiza el fenómeno Milei?

– En primer lugar esta no es una ola liberal de la Argentina sino un fenómeno antipolítica que se da en países desarrollados y en países subdesarrollados. En todos lados hay una crisis a la democracia, del sistema de partidos, hay una crisis de legitimidad de la dirigencia, y por eso surgen propuestas de antipolítica, con más o menos éxito. En general no llevan a nada, no generan gobernabilidad futura ni estabilidad. Son votos bronca. Hay muchos ejemplos, como Bolsonaro en Brasil pero también al interior de partidos tradicionales, como Trump en Estados Unidos. La crítica las formas políticas tradicionales está en España tanto por derecha como izquierda, con Vox y Podemos. En Argentina hay más tierra fértil para que crezcan estas expresiones porque es obvio que un país que se ha empobrecido, que tiene estancado su PBI hace casi 12 años y que al dividirse cada vez en más gente genera un PBI per cápita menor. Milei es una expresión de la bronca y no de ideas liberales. Hay ideas realmente liberales en el radicalismo y en el PRO. Milei no puede ofrecer ninguna garantía de gobernabilidad en el futuro. La antipolítica genera un escenario de inestabilidad.

– ¿Cree que la figura de Milei crece al mostrarse como un exponente antisistema?

– A Milei lo veo dentro del sistema institucional. Contribuyó a que se incorporara un nuevo impuesto en la Argentina, que es la tasa de viajes aéreos. Lo podría haber evitado. Resulta que venía a eliminar a la casta y en el primer presupuesto se prestó a eso.

– ¿Cómo evalúa la victoria de Lula da Silva en Brasil sobre Bolsonaro?

– Celebro que hayan tenido elecciones en paz. Pero Lula ganó por poco y en el marco de una alianza muy grande, por lo que no tendrá licencia para hacer cualquier cosa. Los kirchneristas están festejando como si hubiese ganado el chavismo. No están haciendo una lectura correcta de lo que pasó en Brasil. Bolsonaro no fue empático con los temas ambientales, se rió del tema del Amazonas, que es el pulmón verde del mundo, ridiculizó el tema de la pandemia al principio. Ha sido muy caricaturesco y poco empático en los temas sociales y a pasar de eso casi gana. ¿Por qué? Porque tuvo logros económicos, bajó la inflación, mejoró el empleo y el salario en los últimos meses. Yo que los kirchneristas no festejaría tanto el triunfo de Lula.

– ¿Qué opina del proyecto de un sector del oficialismo para eliminar las PASO en 2023?

– Cuando se crearon las PASO por ley fue por amplísima mayoría en Diputados y el Senado. En todos los lugares del mundo los cambios en los regímenes electorales se dan en el marco altos niveles de consenso. Si son reglas compartidas mayoritariamente, dejan de tener representatividad. No se puede definir por uno, dos o tres votos. Tiene que haber acuerdos mucho más amplios. Además, ya estamos prácticamente al inicio de la campaña electoral.

– ¿Y la propuesta del ministro de Interior, Wado de Pedro, para suprimir las elecciones de medio de término?

– Es pan y circo. Yo creo que no deberían existir las elecciones de medio término,  es decir que yo podría coincidir con él. Ahora bien, hay que modificar la Constitución para hacer eso. Decir eso es como tirar una bomba de humo.

Ping Pong de preguntas

* Una comida favorita: milanesas al horno

* Un lugar de su provincia que recomienda visitar: el Valle de Uco

* Una bebida favorita: vino tinto

* Una película: El Secreto de sus Ojos

* Un libro para recomendar: “Una breve historia sobre casi todo”, de Bill Bryson

* Un dirigente político que admire: Alfonso Prat Gay

* Un prócer que lo inspire: Domingo Faustino Sarmiento

* Alguien en quien confiar: Rodolfo Suárez

* Alguien en quien desconfiar: el kirchnerismo en general

* Si no hubiese sido dirigente político, qué otra profesión le habría gustado desarrollar: jugador de fútbol

Artículos Relacionados