Luego de haber estado presa tres años, Elizabeth Ventura recuperó la libertad este miércoles en la noche. Estuvo investigada junto a su amiga Mónica Castro, conocida como “La Bruja“, por haber ideado -supuestamente- el asesinato por encargo de su marido, León Burela.
El jueves 29 de septiembre ambas fueron absueltas por el delito por el cual arriesgaban una pena a prisión perpetua.
El juicio por jurados no llegó a un acuerdo unánime y ante esto la Fiscalía tenía dos opciones: continuar con la acusación y recurrir a otro jurado popular. O desistir de la acusación, que fue lo que ocurrió. Ante esto, inmediatamente, el Juez debió absolver a las acusadas.
Castro recuperó la libertad esa misma noche, sin embargo, Ventura quedó detenida acusada de abuso sexual agravante. Quien la acusó es otra presa. Si bien la mujer continúa procesada por este delito, el proceso será en libertad.
Ventura explicó cómo fue el doloroso aprendizaje de pasar por la cárcel. Dijo que le dolía estar encerrada, despertarse en un lugar que no fuera su casa y vivir con personas con las que no tenía vínculo.
En exclusiva, entrevistada por Noticiero Nueve dijo: “Me acusaron de asesina. Jamás se me hubiera ocurrido mandar a matar al padre de mis hijos, a quien fue mi esposo por 32 años, por más que hubiera un conflicto“, dijo.
Respecto a qué había consultado con Castro, dijo: “Por lo único que consulté fue para tener armonía, yo no quería que él se operara porque tenía miedo que se muriera. En ese momento no confiaba en Dios, confiaba en algo mágico, en ese momento yo confié en las artes de mi amiga“.
