En el marco de la Asamblea de las Economías Regionales, llevada a cabo en la CAME (Confederación Argentina de la Mediana Empresa) a mediados de este año donde se encontraban el Ministro de Economía Sergio Massa, José Ignacio de Mendiguren (Secretario de Industria y Desarrollo Productivo de la Nación), Jorge Solmi (flamante Titular de la Unidad de Coordinación Federal y Operativa Agropecuaria) y Gabriela Lizana (Directora del BICE Fideicomiso) el sector productivo vitivinícola solicitó a las autoridades presentes que tomaran medidas sobre las constantes amenazas de importación de vinos a granel.
En respuesta a este pedido y bajo la gestión de Gabriela Lizana dentro del equipo de trabajo del Ministerio de Economía y la Secretaria de Industria y Desarrollo productivo de la Nación se informó la puesta en práctica la 2204.29.10 correspondiente a vinos (varietales -finos- y los demás, presentados en más de 10 L, o sea a granel) está vigente desde julio 2022 en LNA Licencia No automática de Importación.
Esta acción busca controlar el ingreso de vinos a granel al país haciendo necesaria la autorización de importaciones y, de esta manera, lograr la protección para los productos de la producción vitivinícola y de vino a granel en el mercado nacional. El objetivo central es eliminar cualquier competencia desleal dentro del sector vitivinícola para 18 provincias de Argentina incluida Mendoza, controlando así la importación. Este tipo de medidas no son nuevas ya que, por ejemplo, ya existían los vinos espumantes.
Por otro lado, Gabriela Lizana enfatiza que “Estamos escuchando a los sectores productivos y trabajando en equipo protegemos las economías regionales”.
De esta manera se logra que los vinos varietales finos a granel (varietales -finos- y los demás, presentados en más de 10 Litros) estén dentro los productos con licencia no automática (LNA) y este tipos de importaciones pasen por un proceso de revisión y análisis de la “necesidad de importación” pero que en el marco de alguna maniobra meramente especulativa queda descartada la posibilidad de hacerlo.
La preocupación del sector productivo vitivinícola se debe al fantasma de que se repita la situación de quebranto que originó la importación de vinos a granel durante el
gobierno de Mauricio Macri sin ningún control que afectó directamente el precio de mercado por el aumento innecesario del stock vínico. “Al trabajar estos pedidos concretos de los sectores productivos estandartes de la provincia, se logra un gran alivio y avance para los productores regionales de Cuyo. De esta manera, se cuidan las fuentes de trabajo genuino de la región” destacó Lizana.
