Economía

De qué se trata el “bono Vaca Muerta” que pretende crear el Gobierno

El economista Pablo Manzanelli, coordinador del Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (Cifra-CTA), propuso este sábado que el Estado lance “un bono Vaca Muerta” con “una garantía muy significativa, que son los propios recursos naturales”, para crear así un instrumento de inversión financiera alternativo a la compra del dólar ilegal que “solvente lo que la Argentina necesita, como reducir las importaciones energéticas”.

Manzanelli, magíster en Economía Política, aseguró en declaraciones a la radio AM530 que “la situación muy compleja” que atraviesa el país requiere hacer “una tarea fina” que incluya “medidas heterodoxas” como lanzar un bono ligado a la explotación de Vaca Muerta, “que nadie duda que va a ser exitoso”, para ofrecerle al “exportador de granos qué hacer con los pesos” una vez que liquida, porque -advirtió- “si no se lleva todo al paralelo y tenemos las corridas cambiarias”.

El investigador de Flacso y la Universidad de Quilmes (UNQ) planteó además que la creación de un bono que ofrezca “garantías a los inversores”, al estar atado al desarrollo de la cuenca de petróleo y gas no convencional, contribuiría a “licuar un poco el exceso de pesos que hay en la economía y que no encuentran inversión productiva”.

En cuanto a las encrucijadas de una coyuntura atravesada por “la inflación muy alta”, reiteró que la realidad económica obliga a implementar una “tarea fina” que él describió como la necesidad de “recalibrar salarios, tarifas y demás, pero al mismo tiempo controlando los precios”, lo que implica “configurar una nueva estructura de precios relativos y plantear un congelamiento para sostenerlo”, detalló.

Sobre la convocatoria a un potencial acuerdo de precios y salarios por 60 días, Manzanelli propuso que esa iniciativa vaya de la mano de la implementación formal “de un nuevo sistema de tipo de cambio múltiples, que permita el ingreso de dólares y que esté subordinado a una política industrial de desarrollo”.

Al describir la actualidad económica, consideró que “una salida macro de ajuste fiscal no solucionaría los problemas de la actualidad” porque si bien podría “reducir las presiones cambiarias” por otro lado profundizaría el problema a la “crisis salarial”, con el riesgo de generar “un ajuste con estancamiento económico, crisis y aumento del desempleo”, con lo cual la “desestabilización dejaría de estar en el Banco Central y en los dólares para estar en la calle”.

En esa línea, insistió que antes de poner en marcha “la tregua de precios y salarios” deberían “recalibrarse distintas variables” de la economía, para lo cual llamó a actualizar los salarios a través de “un aumento general por decreto” mediante una suma fija que beneficie incluso a trabajadores que cobren más de 150.000 pesos.