No hay caso, y no parece haber solución: la postal del viernes pasado, cuando la Asociación de Anestesistas de Mendoza (AMA) se retiró de la mesa de diálogo convocada por el gobierno, es un verdadero cuadro de situación de lo que sucede en la provincia.
Por caso, hay más de 6.000 cirugías que continúan sin poder realizarse y estiman que normalizar la situación llevaría al menos 6 meses.
El conflicto que mantiene el Gobierno de Mendoza con los anestesiólogos no vislumbra por el momento una solución efectiva, pese a la Declaración de Emergencia en Anestesia, que el gobierno impulsó y logró que sea aprobada en la Legislatura.
En las cinco mesas de diálogo llevadas a cabo, no hubo solución al conflicto y desde el gobierno, aseguraron que la negociación entró en una etapa crítica.
El ofrecimiento de pase a planta de los profesionales con un sueldo de 70 mil pesos al mes, fue rechazado por los profesionales, fue rechazado, ya que aseguran que viajando a provincias vecinas, ganan hasta el triple por mes.
Según datos relevados por el Ministerio de Salud publicados por el portal Minuto Ya, existen en la provincia 229 anestesiólogos con matrícula activa, de los cuales solo 61 poseen cargos de planta, a pesar de los ofrecimientos reiterados por parte del Poder Ejecutivo para ocupar los cargos vacantes.
Asimismo, este año, 68 profesionales comunicaron su voluntad de no renovar los contratos de prestación de servicios que mantenían vigentes en el subsector público.
