Christian Sanz

😖 Walter Bento, los secretos del destituido juez cuyo silencio temen los políticos mendocinos

¿Y si el malogrado juez habla alguna vez? ¿Y si cuenta todo lo que sabe y que complica a conocidos referentes locales?

La destitución del juez Walter Bento, que culminó con su encarcelamiento en Mendoza, causa escozor en puntuales referentes radicales y peronistas de la provincia, ya que el malogrado magistrado Federal guarda secretos de unos y otros,. non sanctos en la mayoría de los casos.

Algunos de ellos fueron revelados por Diario Mendoza Today el 19 de julio de 2021, cuando publicó los chats del celular de Bento, que aparecen en el expediente judicial.

Jueces, fiscales, legisladores, periodistas, empresarios… la lista de los que le pedían favores al suspendido juez es interminable. Y muchos de esos pedidos ni siquiera aparecen registrados en su teléfono, porque fueron gestionados personalmente, o a través de otras vías de comunicación.

¿Qué pasaría si Bento decidiera revelar todo eso de repente? ¿Estaría preparada la sociedad mendocina para tolerar la densidad de esa información? ¿Y la Justicia? ¿Podría avanzar contra los referentes de la política, la justicia y el mundo empresario presuntamente implicados?

En estas horas hay severo temor en el círculo rojo mendocino por todo eso que podría destaparse de repente. Sobre todo porque el juez había anticipado que el límite de su tolerancia era la posibilidad de ir preso.

El contexto no es moco de pavo: Bento está acusado de cobrar coimas en Mendoza para favorecer a presos, imputado como líder de una asociación ilícita, cohecho, enriquecimiento ilícito y lavado de activos.

Y sus hijos fueron señalados de “haber puesto en circulación fondos de procedencia ilícita, al adquirir bienes, muebles e inmuebles registrables, como así también realizar inversiones en fideicomisos inmobiliarios y numerosos viajes al exterior“.

Desde el inicio de la investigación, la Cámara Federal de Mendoza confirmó el procesamiento de 22 personas, entre las que se encuentran el hoy destituído juez federal y su esposa Marta Boiza, también investigada por enriquecimiento ilícito.

Como puede verse, la presión de la olla no da para más. En cualquier momento explota. Y promete dejar daños por doquier.

Artículos Relacionados