Lenta y tibiamente, la Cámara de Empresarios Mineros (CAMEM) empieza a instalar la discusión más incómoda para Mendoza: “Queremos que la minería vuelva a ser un tema de agenda en 2022”, aseguró su titular Raúl Rodríguez.
No es casual: la CAMEM es entidad miembro de la UIM, cuyo flamante presidente también dijo semanas atrás que se buscaba reinstalar el debate de la megaminería.
Como sea, Rodríguez admitió que la clave estará en la campaña de propaganda que los lobbistas mineros encaren para tratar de convencer a amplios sectores de Mendoza.
En tal contexto, Rodríguez instó a “buscar el diálogo con quienes no quieren el avance de la megaminería”, aunque de entrada se negó a llamarlos ambientalistas.
“No los llamamos ambientalistas porque no creemos que lo sean, nosotros también somos ambientalistas y estamos comprometidos con el cuidado del medio ambiente no solo como empresarios sino también de manera personal”, puntualizó el empresario en un comunicado difundido por la UIM.
Finalmente, en el mismo documento Rodríguez cuestionó la legitimidad de la Legislatura para resolver la cuestión final sobre proyectos mineros.
Los metalúrgicos también
Hace algunas semanas, a través de un comunicado, la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Mendoza hizo saber a la opinión pública su postura sobre la norma que recientemente aprobó la provincia de Chubut respecto al impulso a la minería.
“Desde nuestro sector venimos reclamando el desarrollo responsable de la minería en Mendoza con todos los cuidados y recaudos necesarios, con el objetivo de crear desarrollo, puestos de trabajo y crecimiento para toda la provincia de la mano de una noble actividad que atraviesa nuestra vida en los más diversos aspectos”, sostiene el documento que dieron a conocer entonces.
Y añade: “En ese sentido, queremos hacer saber que desde Asinmet, avalamos la sanción de la Ley 149 de la provincia de Chubut y continuamos sosteniendo en que la minería es una actividad lícita que, con la tecnología y los controles existentes en el siglo XXI, puede ser desarrollada en nuestro suelo”.
Asimismo, el comunicado agrega: “Entendemos que la sanción de la Ley 149 no viene a hacer otra cosa que completar el trámite legal que estableció allá por el 2003 la entonces Ley 5.001 (hoy 149)”.
Asinmet rechaza en ese paper “las actitudes violentas de grupúsculos que no comprenden que la minería no sólo es esencial para desarrollo de los pueblos, sino que hoy es imprescindible para los desafíos relacionados con las nuevas tecnologías, su utilización y su proyección como solucionadoras de problemas”.
Y culmina: “Es así como desde Mendoza, no sólo bregamos por el cumplimiento de lo avalado por el Legislativo y el Ejecutivo chubutense, sino que esperamos que nuestra provincia se dé el debate serio sobre la necesidad imperiosa de ampliar su matriz productiva, cuestión que debe incluir, indefectiblemente, la actividad minera en todo su potencial”.
