🤦🏻♂️ Se inyectó mercurio para convertirse en un X-Men
Tras ver una película de Wolverine, de los X-Men, un chico se puso una inyección de mercurio en el brazo.
Un adolescente de 15 años decidió ponerse una inyección de mercurio en sus brazos, para intentar parecerse a Wolverine, de los X-Men.
La madre del chico explicó a los doctores que le atendieron que recientemente había visto X-Men Orígenes: Wolverine. Esto llevó a los médicos a pensar que el chico debió querer parecerse a Mercurio, una de los X-Men. Pero esta superheroína no aparece en la película, solo aparece en los cómics de X-Men. Por lo que llegaron a la conclusión que era Wolverine a quien quería parecerse.
Los exámenes psiquiátricos no dilucidaron que el chico tuviese intenciones de suicidarse, simplemente fue su fanatismo por los superhéroes lo llevó a querer convertirse en uno. De hecho, esta teoría quedó demostrada cuando se comprobó que también había dejado que le picaran algunas arañas, en un intento por convertirse en Spiderman.
La suerte de este chico fue que la inyección de mercurio no fue intravenosa. Si no, subcutántea.
El chico había extraído el metal de un termómetro roto y un viejo aparato para medir la tensión que encontró en su casa. Después, se lo inyectó, pero afortunadamente fue justo debajo de la piel.
Por lo tanto, el único síntoma que experimentó fue la aparición de múltiples úlceras en el antebrazo. También resultó tener niveles elevados de mercurio en la orina, pero no parecía que este hubiese llegado a dañar órganos.
La inyección de mercurio provoca primero diarrea, pérdida de apetito y fatiga endurecimientos en los brazos y daño en los riñones, y luego, eventualmente, puede provocar la muerte.
