Las insólitas excusas de Our Ranch para no pagarle a sus “asociados” (y el ataque a Mendoza Today)
Se puede acusar de muchas cosas a Our Ranch, menos de no ser creativos. Han inventado un curro que no es nuevo, es cierto, pero se valen de excusas nunca antes utilizadas.
Ciertamente, se trata de una estafa piramidal más, pero estos tipos lo han hecho a todo trapo, con presuntas oficinas en Estados Unidos y socios de alto vuelo. Chapeau.
Sin embargo, finalmente, como demostró Diario Mendoza Today, todo era una fachada vacía: ni las oficinas eran reales ni los fundadores eran de carne y hueso, apenas sí gente recortada de Google.
Como sea, todo se dio como era previsible y anticipó quien escribe estas líneas: llegó un punto en el cual no hay más dinero para repartir y los timadores empezaron a regalar excusas en sus grupos de Whatsapp para justificar la sequía.
Como ya reveló este diario, en su momento mencionaron que estaban arreglando el “sistema” (sic). Pero el tiempo pasó y la guita no aparece.
Entonces se inventaron una nueva excusa, siempre original: “Hay 200.000 órdenes de retiro en cartera. Prometemos ocuparnos de ellos uno por uno dentro de los 30 días. Lamentamos nuevamente esta situación. Esperamos que dentro de los 30 días, los usuarios puedan completar el retiro a través de la situación p2p para aliviar la presión de las remesas en el departamento financiero”, dice el comunicado (ver al pie), firmado por el inexistente Kiang Saetang. Pueden buscarlo en todo el mundo y no lo encontrarán, porque no es real.
Lo curioso del texto enviado a los asociados es que también se ocupa de este cronista en un párrafo, casi al pasar: “También advertimos que hay un periodista mitómano que difunde noticias negativas y falsas atacando a nuestro destacado personal. Esperamos que no todos escuchen los rumores y confíen en nuestro trabajo como lo vienen haciendo para el gran crecimiento de la empresa y personal de cada uno”.
¿Hace falta mencionar que todo lo que se anticipó desde Mendoza Today se cumplió al pie de la letra? Ello sin mencionar que, a pedido de Our Ranch, se aportaron los nombres de los abogados de este diario y aún no les ha llegado ni siquiera una carta documento.
Finalmente, todo parece un mal chiste. Lamentablemente no lo es, y hay damnificados por doquier, que han confiado sus ahorros a un sistema que terminó siendo un engaño.
Y ya que hablamos de chascarrillos, el mejor remate aparece al final del mensaje ya mencionado: “El problema actual de la plataforma se debe a la limitación del número de transferencias por día por el número de tarjeta bancaria”. Esto último no es ningún chiste… se aclara por las dudas.
