Faltaba un minuto para culminar el enfrentamiento entre el Inter de Porto Alegre y Chapecoense hasta que todo se desmadró. Mientras los gaúchos ganaban por 2 a 1 contra el “Chape”, un integrante del equipo local agredió a un rival y desató una feroz contienda en el Arena Condá.
En la sexta fecha del Brasileirao, el delantero Bruno Silva quiso buscar el balón para sacar un lateral en los últimos minutos del partido. La presión de la ventaja de su contrincante ya le hacía hervir la sangre pero todo comenzó cuando un jugador del conjunto visitante quiso demorar aún más el avance del plantel.
Peglow alejó la pelota de un taco, lo cual desató el enojo de Silva y le respondió con una violenta patada que lo tiró al piso. Los compañeros de equipo del agredido no tuvieron otra reacción que salir al ataque del responsable del golpe.
Quienes protagonizaron la batalla fueron el propio autor de la patada, el arquero suplente del Inter, Danilo Fernandes; y su compañero Caio Vidal. El segundo salió al encuentro del futbolista del Chapecoense y se interpuso entre sus agresiones.
Sin embargo, sus esfuerzos fueron en vano ya que le propinó un golpe de puño en el rostro de Vidal. Tras la escalada de tensión, el árbitro terminó expulsando a los tres que intervinieron en la pelea con una tarjeta roja directa por comenzar y fomentar la lucha entre los jugadores.
